La Agencia Espacial Europea busca nuevos astronautas

Si aspira usted a convertirse en astronauta y cumple con los requisitos establecidos por la Agencia Espacial Europea esta es su gran oportunidad de viajar al espacio. La agencia lanzará a finales de marzo el primer proceso de selección de los últimos 11 años –la última vez fue en 2008- para escoger a los candidatos a integrar futuras misiones de exploración espacial. Los interesados tendrán ocho semanas de plazo, entre el 31 de marzo y el 28 de mayo de 2021, para remitir su solicitud y el proceso de selección no culminará hasta octubre de 2022 con la contratación de una nueva hornada de cuatro astronautas y la creación de una reserva de una veintena de astronautas.

"Recomiendo que los interesados vayan con ganas de participar en una aventura colectiva, que se preparen bien y que sean pacientes porque será un proceso largo. Así que paciencia y perseverancia", ha señalado durante el lanzamiento oficial de la campaña de contratación Claudie Haigneré, médico especializada en Reumatología, con varias misiones espaciales a sus espaldas en la nave 'Soyuz' y una de las pocas mujeres europeas en ir al espacio. Al igual que ella, el italiano Luca Parmitano, piloto de pruebas del ejército italiano, tampoco desaprovechó la ocasión de presentar su candidatura cuando se abrió el último proceso de selección en 2008.

"Habíamos escuchado que quizás habría una convocatoria. Recuerdo cada momento. La selección en sí fue ya una gran aventura. Me encontré con gente supermotivada, muy inteligente y muy cualificada y tuve más suerte que otros", rememora durante una presentación virtual organizada por la ESA. En solo unos meses, los cuatro elegidos –de entre las miles de candidaturas que se esperan- podrán seguir sus pasos e integrar futuras misiones a la estación espacial internacional -hay al menos un vuelo cada año- y puede que a la órbita de la Luna gracias al programa 'Gateway'. 

Conocimientos, idiomas y edad

Según las reglas de la ESA, podrán presentarse a la selección todas aquellas personas que demuestren “conocimientos científicos” y sean capaces de demostrar “habilidades sobresalientes en los campos de trabajo apropiados”. Es decir, que lleven en su mochila un master (aunque no doctorado) en cualquier tipo de disciplina científica. Desde física hasta biología, química, matemáticas, ingeniería o medicina y que dispongan de un mínimo de tres años de experiencia profesional, lo que incluye haber trabajado en un laboratorio, la investigación sobre el terreno o trabajo en un hospital. También sumará puntos el hecho de tener experiencia como piloto o el conocimiento de idiomas. El inglés, un nivel excelente tanto hablado como escrito, será absolutamente primordial para alcanzar el puesto pero hablar otras lenguas será una ventaja. Por ejemplo, aunque hablar ruso no cuenta como prerrequisito es la segunda lengua de la Estación Espacial Internacional y se enseña durante el período de formación.

Además, los elegidos tendrán que saber “trabajar bajo presión”, disponer de habilidades manuales importantes, estar dispuestos a trabajar bajo horarios irregulares, y realizar viajes frecuentemente, tanto dentro de Europa como fuera del continente europeo. La única gran barrera estará en la edad ya que sólo podrán presentarse personas que no hayan superado los 50 años. “Todas las candidaturas de más de 50 años no serán consideradas”, ha explicado Zineb Elomri, responsable de recursos humanos de la ESA que aspira a seguir aumentando también el porcentaje de mujeres a bordo de la agencia por lo que anima a mujeres a presentarse. Actualmente, 1 de cada 3 empleados (29%) son mujeres mientras que el 15,6% de las candidaturas en la selección de astronautas de 2008 correspondieron a mujeres. La ESA también ha anunciado su intención de seleccionar a una o dos personas con discapacidad que formarán parte de un proyecto que determinará si se pueden enviar personas con discapacidades al espacio.

Largo proceso de selección

El primer paso en el proceso de selección será la verificación de los currículums, las cartas de motivación, los certificados médicos y el pasaporte ya que sólo podrán optar nacionales de los Estados miembros o los países asociados a la ESA. Aquellas candidaturas que superen esta primera criba, que tendrá lugar de mayo a junio, tendrán que afrontar posteriormente un test psicológico y un test psicotécnico. “Es un trabajo enorme hacer pasar el test a todos pero queremos el mayor número de candidatos posibles”, explica el jefe del equipo médico de la ESA, Guillaume Weerts. Quien supere esta etapa será sometido a un examen médico para verificar que está sano y posteriormente a varias rondas de entrevistas con un panel de expertos y con el director general de la agencia que tomará la decisión final en octubre de 2022.

Quien supere este año y medio de pruebas tendrá posteriormente que superior un intenso período de formación dividido en tres fases. El primero será un entrenamiento básico en el Centro Europeo de Astronautas, ubicado en la ciudad alemana de Colonia, en el que formarse en ingeniería espacial, ingeniería eléctrica y otras disciplinas científicas. Le seguirá un segundo año de formación avanzada, con especialización en algunas funciones como robótica, navegación, paseos espaciales o operación de datos, y que culminará con la última etapa de entrenamiento específico.