Los menores de 55 que hayan pasado el covid deberán esperar seis meses para vacunarse

El Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas han decidido que, ante la escasez de vacunas, no se vacune hasta seis meses después de haberse contagiado de covid a los menores de 55 años de edad. En un inicio la estrategia de vacunación sí contempló vacunar a los que ya hubieran pasado la enfermedad y pertenecieran al primer grupo priorizado, es decir, los mayores en residencias y el personal sanitario de primera línea, pero la actualización de la estrategia acordada el martes en la Comisión de Salud Pública y difundida este miércoles indica que a las personas de hasta 55 años, tanto del personal sanitario, como de los colectivos esenciales, no se las vacune “hasta pasados seis meses desde el diagnóstico de la infección”.

A los mayores de 55 años o con factores de riesgo sí que se les vacunará igual que aquellos “sin antecedentes de covid”. Además el documento señala que también tendrán que esperar seis meses los menores de esa edad que tras recibir la primera dosis de cualquiera de las tres vacunas disponibles actualmente en España se contagien.

La estrategia reconoce que las recomendaciones "son provisionales", por lo que si cambia la evidencia científica en torno a la protección que generan los anticuerpos y durante cuánto tiempo, el plan se amoldará a los nuevos estudios. En este sentido, el documento recoge que la evidencia actual "indica que la reinfección es excepcional en los seis meses posteriores a una infección natural, aunque esta suposición es menos plausible en las personas más vulnerables", por lo que a estas sí que se les administrará los pinchazos antes de seis meses.

Las indicaciones para AstraZeneca

Además, la estrategia incorpora a qué colectivos se les tienen que administrar el antígeno de AstraZeneca, una vez que la Comisión de Salud Pública optó por el criterio más conservador y decidió que no utilice en personas mayores de 55 años, dado que no hay evidencia suficiente sobre cómo las protege. A este respecto, la Comunidad de Madrid pedirá esta tarde en la reunión de la Comisión Interterritorial que se eleve la edad hasta los 65 años con el argumento de que no hay ningún dato científico que acredite que dicho preparado no va a ser eficiente entre los 55 y 65 años.

Madrid pide elevar a 65 años la edad para recibir la vacuna de Astra Zeneca

Pero, de momento, la estrategia marca que se administrará a los menores de 55 años y, en primer lugar, al personal sanitario que no es de primera línea. Y, tras ellos, a los trabajadores de servicios esenciales como miembros de las Fuerzas Armadas, funcionarios de prisiones, miembros de los cuerpos de seguridad y servicios de emergencia como bomberos, así cómo profesores.

Si bien, el plan señala que no se administrará a aquellos que sufran enfermedades graves, tales como inmunodepresión grave, enfermedad cardiovascular no controlada y enfermedad hepática, renal, metabólica/endocrina o neurológica grave. El motivo es que en los ensayos clínicos de la vacuna de AstraZeneca no se incluyeron a personas con estas dolencias, por lo que, al igual que ocurre con los mayores de 55 años, no hay evidencias sólidas de cómo les protege.

Las variantes

El plan señala que "las personas con estas patologías y aquellas mayores de 56 años se vacunarán más adelante cuando les corresponda por grupo de edad y/o condición de riesgo con la vacuna más indicada en función de la disponibilidad y la nueva evidencia disponible".

En cuanto a la eficacia de las vacunas disponibles frente a las nuevas variantes del virus, el documento subraya que "hasta la fecha los datos de laboratorio apuntan" a que "inducen respuestas de anticuerpos que mantienen su capacidad neutralizante".