Los obispos de Cartagena y de Alicante renuncian a la segunda dosis de la vacuna del covid

Ambos prelados insisten en que no han buscado "ningún trato de favor" y esperarán a recibir la siguiente inyección cuando les toque

Un voluntario recibe una dosis vacuna alemana Curevac en el Hospital de Cruces de Bilbao, el 8 de febrero de 2021

Un voluntario recibe una dosis vacuna alemana Curevac en el Hospital de Cruces de Bilbao, el 8 de febrero de 2021 / Europa Press

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Tanto el obispo de Orihuela-Alicante, Jesús Murgui, como el de Cartagena, José Manuel Lorca Planes, han renunciado a recibir la segunda dosis de la vacuna contra el covid-19 y esperarán a completar su vacunación cuando les toque, ante la repercusión mediática que han tenido.

Murgui, de 74 años, recibió hace ahora un mes la primera dosis en la Casa Sacerdotal y ahora "se pone en manos de la Sanidad Pública para completar su vacunación cuando, donde y como determine la autoridad sanidad". El Obispado de Orihuela-Alicante, en un comunicado, le defiende y dice que el prelado "ha recibido la primera dosis de la vacuna en la Casa Sacerdotal sin buscar ningún trato de favor, siguiendo la dinámica de las demás campañas de vacunación, debido a su vinculación sanitaria con la Casa Sacerdotal".

Sin cumplir el protocolo

Lorca Planes, por su parte, se ha vacunado contra el covid-19 sin cumplir el protocolo, amparándose para ello en que asiste habitualmente a un centro eclesiástico de ayuda a personas vulnerables. En un comunicado, el obispado ha asegurado que Lorca Planes recibió la primera dosis en el centro en el que se vacuna cada año contra la gripe, perteneciente a la diócesis de Cartagena. Las mismas fuentes justifican que el prelado no creyó "en ningún momento estar actuando mal" y "jamás" contempló la posibilidad de que pudieran faltar dosis para los grupos prioritarios de la primera fase de vacunación.