Vergés, sobre el brote de Tremp: "Hicimos todo lo que pudimos, y más"

"Es esencial que se apliquen los protocolos de coronavirus en las residencias, por algo existen" y "Salut intervino y tuteló el geriátrico de Tremp desde el primer momento cuando se conoció el brote". Estas han sido las dos máximas que ha querido defender este martes la 'consellera' de Salut, Alba Vergés, tras visitar el geriátrico de Tremp. Ni rastro de comentarios sobre posibles errores, ni tan siquiera una mención a que el geriátrico no aplicaba las medidas sanitarias requeridas. "Hicimos todo lo que pudimos, y más", ha esgrimido la 'consellera'. Por el momento, 55 personas que vivían en el centro han fallecido por coronavirus, y 55 más ya se han recuperado de la enfermedad, según ha apuntado Vergés.

El único dato novedoso que ha aportado la 'consellera' sobre la tragedia del geriátrico de Tremp, es que prefirieron dejar a todos los pacientes (infectados o no) dentro de la residencia, antes que ordenar traslados. En aquél momento, el 21 de noviembre, eran 49 los pacientes positivos, y 93 los que no estaban infectados "Estábamos hablando de un numero elevado tanto de positivos, como de negativos. Preferimos trabajar dentro de la residencia, sectorizar y desinfectar", ha aclarado Vergés.

Sin embargo, la desinfección llegó diez días más tarde y la sectorización no se hizo correctamente, según afirmó la semana pasada la delegada de Salut en Lleida, Divina Farreny. De hecho, Farreny expuso la mala gestión de la residencia Fiella tanto por lo que hace referencia a los circuitos para evitar la propagación del virus, como por el descontrol en asuntos tan relevantes como los planes individuales de medicación de cada paciente o los registros de todas las personas ingresadas. Dijo que estos fueron algunos de los motivos que llevaron Salut a intervenir el geriátrico.

De esto, Vergés no ha dicho ni mu, a pesar de la insistencia de la prensa. Y simplemente ha explicado la inspección porque gran parte de la dirección de la fundación Fiella resultó también infectada. "Autocrítica podemos hacer toda la que quieran. Lamentamos todas las muertes. Pero hemos hecho todo lo que hemos podido, y más. Hemos estado presentes desde el primer minuto y coordinados con todos los servicios", ha zanjado la 'consellera'.

A día de hoy, el balance de fallecidos se eleva a los 55, cerca del 40% del total de abuelos que vivían en este centro. De estos, solamente 11 murieron en el Hospital de Tremp. La práctica mayoría murió en la residencia. Vergés ha aclarado que estas personas fueron tratadas con 20 bombas de oxígeno, que se instalaron en el geriátrico en agosto. "Gracias a esta inversión pudimos tratar in situ en la residencia", ha aclarado la 'consellera'. En estos momentos, hay 12 residentes ingresados en el hospital de Tremp. Dentro del geriátrico hay 14 positivos más, 55 ya se han recuperado de la enfermedad (50 de ellos no tuvieron ni síntomas). Además, una familia, tras recibir el alta, ha optado por traerse a su familiar en casa.

¿Quién daba las órdenes?

Otra pregunta que Vergés ha dejado sin responder es sobre quién llevaba el timón de la gestión en el geriátrico, especialmente durante la primera semana crítica cuando el virus se expandió a todos los residentes. "La responsabilidad es de los gestores y nosotros ayudamos con el seguimiento intensivo del caso", ha agregado la consellera, que también ha querido dejar muy claro que el centro cambió de manos porque la dirección de la entidad Fiella enfermó al completo.

El lunes, en un videocomunicado, la fundación Fiella seguía exculpándose de toda culpa frente al brote de coronavirus que ha afectado al centro. Negó que no se aplicaran los protocolos, y que los abuelos estuvieran desatendidos. De hecho esgrimieron una inspección de Salut, hecha el día 26 de noviembre, en pleno brote, donde las autoritarias sanitarias les dieron el visto bueno. "Esa inspección fue sobre la legionela", ha aclarado Vergés, que también ha dicho que la última inspección sobre los protocolos covid que pasó el geriátrico de Tremp fechan del mes de julio.

En estos momentos, un 20% de los geriátricos en Catalunya tiene algún brote de coronavirus, y solo en el 7% de los casos (75 centros) está descontrolado. Datos sensiblemente menores a los de principios de mes, cuando eran un 25% con presencia del coronavirus.