DESASTRE ECOLÓGICO

Una alga tóxica causó la mortandad de la fauna marina en Kamchatka

Los cientificos intentan hallar ahora las causas últimas de la proliferación del microrganismo venenoso, sin descartar que la causa última sea el calentamiento global

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Marc Marginedas

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El Gobierno de Rusia ha determinado que el origen de la masiva mortandad de la fauna marina observada desde principios de septiembre en las costas de la lejana península de Kamchatka, en el Lejano Oriente ruso, radica en la proliferación de una microalga tóxica, descartando que lo sucedido hubiera sido causado por un vertido químico o una polución de procedencia humana. "¿Qué es lo que provocó que esto sucediera? La toxicidad de las algas en este periodo", ha declarado este viernes el ministro ruso de Recursos Naturales, Dmitri Kobylkin.

Andréi Adrianov, vicepresidente de la Academia de Ciencias de Rusia, ha ofrecido más detalles acerca del mortífero organismo.  Se trata de "un complejo de especies del grupo Karenia, representantes de dinoflagelados", ha afirmado el científico a la agencia Ria Nóvosti. Esta clase de microrganismos ha causado en el pasado graves mareas tóxicas en otras partes del mundo, una de las más recientes hace dos años en las costas de Florida.   

Pero más que despejar dudas, estas averiguaciones suscitan nuevas e inquietantes preguntas, admite el ministro Kobylkin. "La cuestión más interesante ahora radica en saber a qué estaban respondiendo las algas, porque querríamos saber la razón del descenso del nivel de oxígeno en el agua; no tenemos una respuesta para esto todavía", ha continuado. No se descarta incluso que el responsable último del desastre ecológico sea el calentamiento global, cuyos efectos se están haciendo sentir con especial intensidad en Siberia y en las regiones norteñas de Rusia.  

"Caso sin precedentes"

"Se trata de un caso sin precedentes; no esperábamos que el área de proliferación del alga fuera tan masiva", ha declarado Kirill Vinnikov, biólogo en la Universidad Federal del Lejano Oriente, a la revista National Geographic. "Es como si un elemento vital del ecosistema hubiera desaparecido", ha subrayado  a la misma publicación Vasili Yáblokov, de la organización Greenpeace, quien participa en las investigaciones para determinar el origen de lo sucedido.  

Lejos de remitir, la preocupación en esa remota región rusa va en aumento. A mediados de octubre, Vladímir Solodov, gobernador del territorio de Kamchatka, informó que la mortandad de animales marinos no solo afectaba a la playa de Khalatyrsky, en las proximidades de Petropávlovsk de Kamchatka, la capital regional, sino que también se había observado en el cabo Lopatka, en el extremo sur de la península, y en las costas del mar de Ojotsk.

Además, la ruptura de la cadena alimentaria hace temer por la supervivencia en la región de mamíferos como la nutria marina, cuya población se había reducido a niveles alarmantes en los últimos años debido a la sobrepesca. Esta especie se alimenta de erizos de mar, una de las víctimas del alga tóxica junto con crustáceos, moluscos y pulpos. Según los científicos, a diferencia de otros animales, es poco probable que los dos centenares de nutrias marinas que quedan en la zona emigren de Kamchatka en búsqueda de alimento.