Pulso en el Rialto por el urbanismo táctico

Las peatonalizaciones parciales o totales a base de maceteros, bancos y otros elementos de mobiliario urbano provisional y de bajo coste han dado pie en las dos legislaturas de gobiernos progresistas a desencuentros constantes entre los concejales de Desarrollo Urbano en Valencia, los socialistas Vicent Sarrià y, actualmente, Sandra Gómez, y el concejal de Movilidad y activista de la bici, Giuseppe Grezzi, de Compromís.

El denominado «urbanismo táctico» que ciudades de todo el mundo como Nueva York, París o Londres están aplicando ha dejado en evidencia la falta de sintonía entre Grezzi y Gómez que esta semana, a la vuelta del descanso estival, han vuelto a chocar a cuenta de la remodelación de la avenida Pérez Galdós, donde los socialistas no parecen dispuestos a ceder competencias ni protagonismo.

La decisión del edil de Movilidad de presentar por su cuenta el jueves pasado la nueva planta viaria de Pérez Galdós, que en una primera y provisional intervención perderá un carril para coches por sentido y ganará aceras de cuatro metros de anchura, provocó el enfado de la vicealcaldesa, que el mismo día se reunía con los vecinos para explicarles los detalles del proyecto definitivo de «pacificación» de la avenida, donde el túnel de tráfico de los años 60 será eliminado.

Los socialistas, que en su momento criticaron por su falta de calidad la primera intervención «blanda» del edil de Movilidad en la ciudad para cerrar en 2016 al tráfico el entorno de la Lonja, monumento Patrimonio de la Humanidad, han acabado asumiendo y aplicando por toda la ciudad el urbanismo táctico, un sistema rápido y barato para ganar espacio al coche.

Desarrollo Urbano incluso ha encargado una guía para «transformaciones urbanas flexibles» con el objetivo de armonizar y mejorar los diseños de las intervenciones. También para evitar las críticas de los grupos de la oposición a sus intervenciones como ha ocurrido en la plaza del Ayuntamiento. Para el cierre provisional de este entorno, Movilidad instaló el pasado mes de mayo 200 maceteros de color verde y blanco, que muchos ven inapropiados por chapuceros para un entorno de alto valor patrimonial, donde también se echan en falta más sombras.

Esta cuestionada intervención en la «plaza mayor» ha sido ejecutada, a través de la EMT, por Giuseppe Grezzi, que también aquí tomó la delantera a la intervención definitiva anunciada por Desarrollo Urbano y para la cual se ha convocado un proceso de participación ciudadana y un concurso de ideas.

En la peatonalización de la monumental y turística plaza de la Reina también ha llevado la batuta Giuseppe Grezzi, aunque aquí fue el anterior concejal de Urbanismos quien cedió el proyecto por estar ligado a la reforma del aparcamiento subterráneo de la plaza, que se remodelará con un diseño de José María Tomás y el fallecido Antonio Escario. Una cesión que en el PSPV se ve ahora como «un error».

Cuatro concursos de ideas

La covid-19 ha dado alas a los proyectos de urbanismo táctico, que la vicealcaldesa quiere llevar a los centros escolares para garantizar más zonas peatonales y seguras frente a la pandemia. Todo sin renunciar, recalcan, a la ejecución de intervenciones permanentes con suficiente calidad de diseño y de materiales,como reclaman, entre otros, el Colegio de Arquitectos.

De hecho, hay convocados cuatro concursos de ideas: el citado de la plaza de la Reina, el de Brujas-Mercat (que convocó la Conselleria de Obras Públicas y se adjudicó a Blanca Peñín y Elisabet Quintana), el de la plaza del Ayuntamiento y el último, el de Pérez Galdós, que se reconvertirá, según lo anunciado esta mismas semana por Sandra Gómez, en un bulevar ajardinado, como demandan los vecinos del entorno, y donde se va a eliminar el actual y obsoleto túnel para el tráfico rodado.

Los rifirrafes entre Movilidad y Desarrollo Urbano no se han quedado solo en la reforma de plazas emblemáticas, como la de San Agustín, que también ha sido objeto de controversia.Los técnicos del área de Movilidad Sostenible no terminaban de entregar el esquema de la planta viaria de esta plaza, que también ha sido objeto de una actuación blanda para pacificar el tráfico y ganar espacio peatonal por parte de Urbanismo.

Los socialistas están molestos por los retrasos en el servicio de Movilidad Sostenible con las plantas viarias que, aseguran, han bloqueado las intervenciones de pacificación del tráfico en Pérez Galdós y Jorge Juan. Unos tiempos que Grezzi justifica por la complejidad de muchas de las citadas intervenciones en las que hay que hacer ajustes de líneas de autobuses, estudiar los accesos a los aparcamientos y reordenar el tráfico. Como ejemplo cita la remodelación del tráfico de la calle Colón y el cierre de la plaza del Ayuntamiento que ha estado estudiándose más de cuatro años.

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