SUSTO EN VALÈNCIA

Atacada por un escorpión al abrir un bolso comprado en China a través de internet

Biólogos del Bioparc lo identifican como escorpión dorado o de Manchuria tras ser alertados por los médicos del hospital de la Ribera de Alzira

Una chica, atacada por un escorpión al abrir un bolso comprado en China por internet

Una chica, atacada por un escorpión al abrir un bolso comprado en China por internet. / periodico

Teresa Domínguez

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El envío le llegó antes de lo previsto. Había pasado poco más de una semana desde que pidió el bolso a la tienda china de internet Mojoyce, a través de la plataforma Aliexprés, el mayor centro de compras online del gigante asiático. El mensajero se lo entregó en su casa de Algemesí pasadas las 10.00 horas del lunes y Judiht, de 25 años, lo abrió enseguida. "Estaba mi hermano delante. Al desenvolverlo, vi que era más pequeño de lo que me esperaba. Saqué los plásticos que tenía dentro y metí la mano izquierda para comprobar su capacidad. En ese momento, sentí un dolor muy intenso en el pulgar". Instintivamente, Judiht tiró el bolso encima de la cama y en ese momento ambos vieron cómo del interior salía el escorpión, que empezó a corretear sobre el edredón. "Lo metimos en un vaso, que es lo primero que tuvimos a mano, y luego en un bote", explica Judiht, que ha denunciado los hechos ante la Policía Nacional por sugerencia de los médicos y "para alertar a otras personas y no vuelva a suceder". Su mano izquierda empezó a hincharse cada vez más, mientras aumentaba el dolor y el picor, así que Judiht, asustada, se fue inmediatamente al Hospital de la Ribera en Alzira (València).

Con ella llevaba en el móvil el vídeo y las fotos que había tomado su hermano. Los médicos de urgencias le administraron medicación de choque para frenar la inflamación y paliar el dolor y, dado que su estado general era bueno, esperaron a tener la opinión de un experto antes de actuar. El hospital de Alzira pidió la colaboración de los biólogos del Bioparc de València, que identificaron el animal como un ejemplar de scorpion mesobuthus, o escorpión chino o dorado de Manchuria en su nomenclatura no científica. Se trata de uno de los alacranes más comunes en China, así como en Corea y Japón, y el veneno que instila su aguijón es neurotóxico, por lo que produce alteraciones neurológicas y, en ocasiones, la muerte.

El mesobuthus menos venenoso

Por fortuna, el alacrán que encontró Judiht parece ser de la familia eupeus, el menos venenoso del género mesobuthus y de menor tamaño que los más letales, mide entre 4 y 5 centímetros. De hecho, es conocido como escorpión asiático menor o moteado. Gracias a ese hecho, y a que Judiht no sufrió un shock anafiláctico al recibir el veneno, todo ha quedado en un susto y en una amarga experiencia. "El médico me dijo que tuve mucha suerte, porque si hubiese sido alérgica, me aseguró que no habría tenido tiempo siquiera de llegar al hospital...",  explica la joven, que es psicóloga. Una vez que los médicos supieron a qué se enfrentaban, completaron el tratamiento farmacológico y, en vista de que la joven tenía un buen estado general, le dieron el alta, eso sí, sugiriéndole que lo mejor sería denunciar los hechos, así que lo hizo en la comisaría de Policía Nacional de Alzira.

Sin solución de Aliexprés

Los alacranes, como otros invertebrados y muchos reptiles, pueden sobrevivir largos periodos de tiempo sin alimentarse, razón por la cual el arácnido sobrevivió al largo viaje desde China, al que se suma el periodo previo que permaneciese dentro del bolso en el almacén desde el que lo surtió Mojoyce. La joven de Algemesí trató de advertir de lo ocurrido y pedir explicaciones a Aliexprés en cuanto tuvo un momento en el hospital, mientras esperaba en observación de urgencias las instrucciones de los biólogos del Bioparc. Tarea imposible. En su web no hay un solo apartado para reclamaciones, salvo que pidas la devolución del dinero.

Sólo puedes enviar un mensaje al vendedor. Y Judiht lo hizo: 24 horas después, se limitaron a enviarle una respuesta de perogrullo. Y de traductor automático, claro: "Lo sentimos. Tenemos bolsas de PE para proteger la bolsa, así que el escorpión estaba dentro desde el principio". En otras palabras, culpan a su proveedor, de quien se desconoce la identidad, y no aportan ninguna solución ni propuesta, acogiéndose a que, como a ellos les llega la mercancía embolsada, el animal ya debía estar allí cuando lo recibieron y reenviaron a su compradora en Algemesí. De momento, el animal sigue en su casa, dentro de un bote de cristal. Si muere, los biólogos han sugerido que debe introducirlo en alcohol de 96º para conservarlo, de cara el proceso judicial que ha abierto la denuncia policial interpuesta por la joven.