en el puente de la diada

El Parc Natural de l'Alt Pirineu regulará su acceso después de la masificación en la Pica d'Estats este fin de semana

Colas para subir a la cima pico de la Pica d 'Estats

Colas para subir a la cima pico de la Pica d 'Estats / periodico

Carme Escales

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Colas y turnos para ascender los últimos metros de altura hasta coronar la cima más alta de Catalunya, los 3.143 metros de la Pica d’Estats, que este puente de la Diada ha recibido más visitantes que nunca.  La imposibilidad de celebrar manifestaciones en Barcelona ha llevado a muchos catalanes a calzarse las botas de montaña y subir a conmemorar el 11 de septiembre en lo más alto, un ritual que los últimos años seguían solo algunos fieles a esta excursión a la cima a la que se accede desde Catalunya desde el pueblo de Àreu, en el Pallars Sobirà.

Las 90 plazas de aparcamiento en La Molinassa, junto al refugio de Vallferrera, en el camino hacia la Pica d’Estats, se han visto desbordadas este fin de semana de puente por decenas de vehículos que aparcaban en los laterales de la carretera. “No solo ha sucedido este fin de semana, lo hemos visto en varias ocasiones este verano, 100, 140 y 150 coches”, reveló el presidente de la Entidad Municipal Descentralizada de Àreu, Iu Escolà. Por ello, según explicó, Àreu volverá a poner sobre la mesa la intención de regular el acceso a la zona de aparcamiento, aplicando el cobro por aparcar, tal y como ya se hace en otros lugares como en el acceso al Aneto y el Valle de Ordesa.

Buscando un equilibrio

“En Àreu invertimos cada año en el mantenimiento de la pista que lleva al aparcamiento de La Molinassa, pero esta inversión no repercute económicamente en el pueblo, cuando más del 50% de los excursionistas que suben a la Pica d’Estats lo hacen en su vehículo privado”, señaló Escolà. “Sabemos que este verano puede ser una excepción, porque no había manifestaciones en las ciudades y seguramente también porque tras el confinamiento se ha puesto de moda salir a caminar por la montaña, pero ya hace tiempo que el control del acceso se está valorando. Imágenes como las de estos días no hacen gracia. Evidentemente que ha sido bueno para la hostelería de la zona, pero hay que tratar de buscar un equilibrio”, apuntó el presidente de la EMD de Àreu.

Desde el propio Parc Natural de l’Alt Pirineu, que firma el video divulgado por Twitter en el que se muestran la concentración de gente en la cima de La Pica, se invita a la reflexión sobre la repercusión en la fauna de la zona de la acumulación de excursionistas. Por un lado, se indica que “cremas solares y repelentes de mosquitos que lleva la gente en la piel son tóxicos para los anfibios que tienen su hábitat en los estanques alpinos donde este verano mucha gente se ha bañado”, actividad que no está permitida. Y, además, la muchedumbre sobre la pedrera de Sotllo, afirman desde el Parc Natural de l’Alt Pirineu, ha puesto en riesgo a la lagartija pallaresa, una especie protegida en peligro de extinción.

Alojamientos rurales como los de Casa Currona, en Àreu, y restaurantes como el del Hostal Montaña, en Alins de Vallferrera, confirman que este año la Diada ha prolongado la temporada. «Hacia el 20 de agosto cada año ya se veía mucha menos gente, pero este mes de septiembre estamos viendo a muchos más excursionistas de lo habitual», dicen desde Casa Currona.

El Parc Natural de l'Alt Pirineu ha anunciado que regulará el acceso de visitantes para evitar la masificación en lugares como la Pica d'Estats, el puerto de Sotllo o Sant Joan de l'Erm. La dirección del parque ha decidido dar un grito de alerta tras la multitud de excursionistas que se han acercado a la zona aprovechando el puente de la Diada, a menudo con actitudes incívicas, sin el uso de mascarillas y obviando las distancias de seguridad. 

En un hilo en Twitter, el Parc Natural del Alt Pirineu ha adjuntado instantáneas de una cola de montañeros para hacerse la fotografía en la cima de la Pica de Estats (3.143 metros), gente bañándose en lagos alpinos - actividad prohibida- o de una larga hilera de autocaravanas en la carretera hacia la estación de Sant Joan de l'Erm.

Una última fotografía muestra una multitud de gente en la tartera de puerto de Sotllo, hábitat de la lagartija pallaresa, una especie protegida y en peligro de extinción. "Todo esto nos lleva a establecer un sistema de regulación del acceso a la zona conjuntamente con Àreu, ente local propietario de los terrenos y los accesos en este monte comunal, y el Ayuntamiento de Alins", adelantó la dirección del Parc Natural del Alt Pirineu, adscrita al Departament de Territori i Sostenibilitat.

La entidad no ha dado más detalles pero precisó que la regulación "será como se acuerde con la EMD de Àreu para evitar que se colapsen los aparcamientos".