El turismo rural de Girona reabrirá cuando Barcelona entre en la fase 3 de desconfinamiento

Los alojamientos rurales de la provincia de Girona están pendientes del desconfinamiento definitivo y de la recuperación de la movilidad entre provincias para retomar la actividad.

La entrada de Girona en la fase 1 de la desescalada este lunes no les afecta, según sostiene el presidente de la Asociación de Turismo Rural de Girona, Ramon Corominas, puesto que el grosor importante de clientes es de la provincia de Barcelona, publica 'Diari de Girona'. A pesar de contar con autorización para abrir a partir de la semana próxima manteniendo las medidas de seguridad, no lo harán hasta que entren en la fase 3, dice.

Corominas cree que las restricciones para viajar al extranjero favorecerán el turismo de proximidad y en complejos más reducidos, como son las casas rurales, pero aun así ya dan por perdida la temporada turística de este verano. Las reservas de Semana Santa y del puente del 1 de mayo se anularon en su totalidad y entre julio y agosto confían al reactivar en parte el sector.

"Hasta que no desconfinen Barcelona totalmente para nosotros es como si no abriéramos", asegura Corominas. Desde la Asociación de Turismo Rural aseguran que el 90% de su clientela es del área metropolitana. Aun así, las <strong>restricciones en vuelos</strong> también pasará factura, puesto que sobre todo en temporada estival los clientes extranjeros o del resto de España que se desplacen a la demarcación en avión para disfrutar de las ventajas del turismo rural tiene un "peso importante". En términos generales calculan que perderán alrededor del 30% de la clientela durante el verano.

Así pues, el sector tiene todas las esperanzas puestas en el cliente nacional, las reservas de última hora y el valor del kilómetro cero (Km0). Así lo ha constatado también a lo largo de esta semana el presidente de la Confederación Catalana de Agroturismo y Turismo Rural, Anton Bundó, que recuerda que el turismo rural repercute en la economía del territorio a través de visitas a cooperativas y compras de aceite o de vino, por ejemplo.

Los alojamientos rurales de todo Catalunya se encuentran en la misma situación.

Alojamientos reducidos

Por otro lado, el sector constata que la tipología de sus alojamientos, con pocas plazas, da más seguridad a los clientes frente a los grandes complejos hoteleros. Al respecto, la Asociación que representa a estos alojamientos en Girona señala, además, que aspectos como por ejemplo la limpieza son más sencillos en entornos reducidos. Aun así, la entidad concreta que de las llamadas que han recibido de gente interesada en reservar casas rurales el que busca son espacios de uso exclusivo para ellos. "El alojamiento que esté formado por dos o tres apartamentos lo tendrá complicado", señala Ramon Corominas. En la mayoría de casos son negocios familiares sin personal, a excepción del servicio de limpieza.