polémica en Catalunya

La Generalitat ha realizado 48 pruebas PCR de las 300.000 anunciadas en centros científicos

La 'consellera' de Presidència, Meritxell Budó

La 'consellera' de Presidència, Meritxell Budó / GENERALITAT

Michele Catanzaro

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El proyecto Orfeu, la apuesta de la Generalitat para llevar a cabo test del covid-19 (PCR) en centros de investigación, sigue sin arrancar un mes después de su anuncio. A fecha de hoy, se ha llevado a cabo 48 pruebas en el Centre de Regulació Genòmica (CRG), según anticipó TV3 y ha confirmado EL PERIÓDICO. 

Los institutos implicados tienen a decenas de investigadores voluntarios listos para hacer las pruebas y han entregado al Departament de Salut unos 7500 viales para recoger muestras, según fuentes de los centros. Sin embargo, los institutos siguen sin recibir las muestras a fecha de hoy.

La Generalitat lanzó Orfeu el 7 de abril, con el objetivo de suplir a las pocas pruebas PCR de las cuales disponían los hospitales con las que aportarían los centros de investigación. El Instituto de Salud Carlos III lanzó un proyecto con el mismo objetivo el día siguiente. Este último, integrado por 24 centros de otras comunidades, alcanzó una capacidad de 5000 PCR al día el 21 de Abril, según fuentes del Ministerio de Ciencia.  Esta cantidad representa un número pequeño para cada centro, pero este enfoque podría haber accelerado el proyecto, según algunos expertos.

Dificultades logísticas

El proyecto catalán tardó más por dificultades logísticas, según el Govern y los centros. No fue inmediato conseguir los tubos de ensayo, poner a punto un robot muy rápido en el Centre de Regulació Genómica (CRG) y coordinar el transporte e intercambio de información entre las residencias (donde se recogen las muestras), los centros (donde se hacen las pruebas) y los hospitales (donde se interpretan los resultados). 

No obstante, el Govern no paró sus anuncios. El 22 de Abril, el asesor Oriol Mitjà afirmó que Orfeu llevaría a cabo 15000 pruebas al día de inmediato.  El 26, un documento interno de Salut fijó el total del proyecto en 190000 pruebas. El 28 la portavoz del Govern Meritxell Budó anunció que se alcanzarían las 300000 con la ayuda de las universidades

Mientras tanto, los centros llevaron a cabo pruebas sobre muestras de sanitarios ya diagnosticados, para validar los protocolos (1073 en el CRG). Pero de momento los diagnósticos reales no alcanzan los 50. 

"El proyecto se anunció antes de lo que nos hubiera gustado", afirman fuentes del CRG. “Pero estamos listos desde el 30 de abril y ahora podríamos hacer 3000 pruebas al día", añaden. 

"La parte de investigación está preparada. La cuestión operativa es ahora la que se tiene que acabar de cerrar", afirman fuentes de la Secretaria d’Universitats i Recerca.

"No ha habido retraso. El acuerdo de gobierno [que lanzó Orfeu] iniciaba su despliegue. Estas cuatro semanas se necesitaban para ponerse a punto", afirma Robert Fabregat, director de investigación del Departament de Salut. "Tenerlo listo hace una semana o quince días habría ayudado. Pero este proyecto se necesitaba sobre todo en la actual fase de desconfinamiento", argumenta Fabregat. 

Pruebas en los hospitales

"Habría servido hace tres o cuatro semanas, cuando la gente iba a los ambulatorios con síntomas y sólo se hacía el diagnóstico clínico porque faltaban pruebas", discrepa Benito Almirante, jefe de servicio de enfermedades infecciosas del Hospital Vall d’Hebron y portavoz de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC).

Esta sociedad científica criticó la idea de hacer PCR en centros de investigación porque considera que los hospitales son el mejor sitio para hacer diagnóstico. Almirante alaba el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) que decidió entregar sus máquinas de PCR a dos hospitales madrileños. 

Casi 100.000 de las pruebas de Orfeu se deberían hacer en residencias, según el documento de planificación de Salut. Pero Almirante considera que los hospitales ya pueden asumir este trabajo. Fabregat afirma que el proyecto ayudará especialmente fuera de Barcelona, donde los hospitales no han ampliado tanto su capacidad, y en otros colectivos, como los Mossos. El proyecto podría ser útil también si se reactivara rápidamente en caso de brotes futuros.