especie protegida

WWF pide una investigación sobre la muerte del oso Cachou

El Fondo Mundial para la Naturaleza solicita datos a la Generalitat y al Gobierno central sobre todas las actuaciones llevadas a cabo tras el fallecimiento del animal

Detaalle de la necropsia realizada al oso Cachou el 14 de abril del 2020

Detaalle de la necropsia realizada al oso Cachou el 14 de abril del 2020 / periodico

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) WWF España ha solicitado a la Generalitat y al Ministerio de Transición Ecológica información sobre todas las actuaciones que se están realizando tras la muerte del oso Cachou, encontrado en Les (Lleida) el 9 de abril, incluidos los análisis microbiológicos y patológicos sobre lesiones de órganos para descartar el uso de veneno.

La organización ha asegurado este martes en un comunicado que ha reclamando la información con la mayor brevedad al director general de Políticas Ambientales y Medio Natural de Catalunya, Ferran Miralles, y al secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, por tratarse de una especie "en peligro crítico de extinción".

La entidad ecologista ha señalado que confía "en que todos estos análisis se estén realizando con absoluto rigor y ha avanzado que en caso de que la información solicitada presente carencias o imprecisiones, adoptará "las acciones oportunas". WWF considera que el anuncio prematuro realizado por el Conselh Generau d'Arán, atribuyendo la muerte del oso Cachou a causas naturales por una pelea con otro macho y una caída desde 40 metros, fue "totalmente inadecuado y alimenta el clima de desconfianza en torno a la veracidad de las causas de la muerte" de este ejemplar, como ya han manifestado otras organizaciones.

Datos de la necropsia

Los expertos consultados por WWF ponen en duda que, tras los datos de la necropsia preliminar aportados por la administración aranesa, "pueda afirmarse sin dudas que se trata de una muerte natural, debido a la falta de heridas y contusiones propias de una muerte de este tipo". WWF España señala que el joven oso encontrado muerto que tenía 6 años era clave, porque aportaba "una importante variabilidad genética a la población oriental de oso pardo", al no tener su padre parentesco con el oso Pyros, el macho dominante del que descienden casi todos los ejemplares de esta población.

Para una población tan pequeña y tan endogámica como esta, la muerte de dicho ejemplar supone una "importantísima pérdida", ha subrayado WWF, que ha precisado que los niveles de variación genética de esta población, que permiten su supervivencia, están entre los más bajos de los descritos en la literatura científica para esta especie.

La polémica

La organización ha insistido en que este oso ha sido objeto de una constante polémica desde su marcaje "y fue señalado sin pruebas como el responsable de diversos ataques a ganado doméstico, lo que llevó a la administración a aplicar un protocolo para el manejo de osos problemáticos y a que determinados sectores exigieran su retirada de la población de Pirineos".

El secretario general de WWF España, Juan Carlos del Olmo, ha afirmado que "el oso es una especie en peligro crítico y no puede existir ni una sombra de duda sobre las razones de la muerte de Cachou, un ejemplar que había sido señalado públicamente por determinados sectores como responsable de daños al ganado en el Val d'Aran". "Reclamamos la máxima transparencia y de forma urgente toda la información disponible a la Generalitat a y al Ministerio de Transición Ecológica para descartar que la muerte de este oso haya sido premeditada", ha agregado.