KIKE HERRERO, astrofísico
"El cielo nos inspira grandes cuestiones"
El astrofísico Kike Herrero investiga exoplanetas y divulga sus conocimientos entre aficionados
Carme Escales
Periodista
Carme Escales
A los 13 años, Kike Herrero (Valencia, 1986) encontró por casa un libro sobre el firmamento y las estrellas visibles en cada constelación. Y salió a buscarlas. Era verano en la Sierra de Albarracín, uno de los mejores lugares del cielo oscuro, y se llevó unos viejos binóculos de su abuelo. Dos años después le regalaron su primer telescopio y con la Societat Astronòmica de Lleida aprendió todo lo que pudo. Estudió Física, un máster en astrofísica y dedicó su doctorado y su labor actual a investigar planetas extrasolares, exoplanetas.
¿Cuántos exoplanetas se conocen?
Más de 4.000, y de ellos, solo unos 20 se han podido fotografiar directamente. La mayoría se estudian a través de su sombra sobre la estrella en torno a la que giran. El primer planeta extrasolar se halló hace 25 años en torno a la estrella 51.
¿Se parecen a la Tierra?
Algunos sí. Y la clave será que en los próximos años podamos estudiar su atmósfera y hallar indicadores de vida, porque en el sistema solar ya es difícil pensar que haya otro lugar con vida.
¿Ha participado en el descubrimiento de algún planeta?
Formo parte del equipo que hace un año encontró el segundo planeta más cercano, en la estrella de Barnard. Con Ignasi Ribas como principal investigador, participamos en red con telescopios de todo el mundo.
"Comparto lo que hago como investigador al mismo tiempo que hago vivir una experiencia emocionante"
¿Dónde está el más potente?
Se está construyendo en el desierto de Atacama. Es el ELT (Extremely Large Telescope). En el Montsec tenemos el Joan Oró, gestionado desde el IEEC y que usan astrónomos de todo el mundo. No es de los más grandes de Europa, pero es uno de los más avanzados tecnológicamente. Con él, los astrónomos investigamos sobre exoplanetas, asteroides, supernovas y galaxias lejanas, entre otras cosas.
¿Qué persigue la astronomía?
Tiene dos aplicaciones muy directas: una es el desarrollo tecnológico. Las cámaras fotográficas, por ejemplo, han mejorado mucho por el estudio del espacio. La otra es la cultura. El cielo nos inspira grandes cuestiones: de dónde venimos y adónde vamos, y si estamos solos. Como la música o la literatura, la ciencia nos hace preguntarnos qué somos o cómo será el sol cuando muera, en unos 5.000 millones de años.
Dejó la ciudad de Lleida para vivir más cerca de las estrellas.
Me fui al Pallars porque es donde se ve el cielo más oscuro de Catalunya. Junto con Xavier Palau iniciamos un proyecto de difusión y divulgación de la astronomía, Celístia Pirineus. Con telescopios portátiles organizamos observaciones del universo personalizadas. No es solo enseñar astronomía, es hacer vivir una experiencia emocionante hablando sobre el universo y compartiendo lo que hago como investigador. He encontrado la combinación perfecta viviendo de la astronomía.
- SociedadUn grupo de jóvenes apalea a un chico en Manresa
- PolíticaAsí están las encuestas de las elecciones en Catalunya 2024
- SociedadDestrozos, puñaladas y "fiestas con escorts" en los nuevos rascacielos de lujo de Madrid: "Me fui por miedo
- InternacionalUn terremoto de magnitud 5.8 sacude la costa griega
- Ocio y CulturaMuere la periodista Anna Pérez Pagès, rigor y compromiso con la cultura
- BarcelonaMAPA | Consulta el alquiler medio, calle a calle, en los municipios de Barcelona
- SociedadUn menor y un hombre que intentaba salvarlo mueren ahogados en la playa del Miracle de Tarragona
- InternacionalEstado Islámico llama a ataques individuales en Europa y Estados Unidos por la guerra en Gaza