CRISIS SANITARIA Y SOCIAL

El coronavirus agrava la incertidumbre de las familias de desaparecidos

Las denuncias ante la policía han bajado a raíz del confinamiento aunque los investigadores siguen trabajando en los miles de casos sin resolver

CRISTINA BERGUA Su rastro se perdió en marzo de 1997.

CRISTINA BERGUA Su rastro se perdió en marzo de 1997.

Roger Pascual

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Miles de familias están confinadas en casa esperando que la puerta se abra. La mayoría llevan así desde mucho antes de la pandemia del coronavirus. Son familiares de desaparecidos que siguen sin saber qué ha ocurrido con su ser querido y a los que el confinamiento puede agravar el estrés que ya sufren. Las denuncias de desapariciones han bajado desde que se decretó la restricción de movimientos con el estado de alerma, aunque los investigadores siguen trabajando para dar respuesta a todos los miles de casos que siguen aún sin respuesta.

"Normalmente tenemos una media 10 a 15 denuncias de desaparición diarias y ahora hay una, tres, cinco...", dicen los Mossos

"Las denuncias han bajado. Si normalmente tenemos una media 10 a 15 diarias ahora tenemos, una, tres, cinco...", explica Laura Villanueva, de la Oficina d'Atenció a les Famílies de les Persones Desaparegudes de los Mossos. Uno de los motivos que señala para este descenso es porque con el confinamiento la gente tiene que estar en casa y no puede marcharse con tanta facilidad. Pese a ello, Villanueva destaca que la Oficina y las búsquedas no se detienen. "No pararemos y que los familiares no paren tampoco, por favor. Sobre todo que no esperen a que pase la pandemia para denunciar. Que no dejen de hacerlo por vergüenza social o por miedo a que multen al desaparecido por saltarse al confinamiento. No habrá represalias". El trabajo en este ámbito se mantiene, las comisarias siguen estando abiertas las 24 horas para presentar las denuncia y en la Oficina continúan atendiendo todas las llamadas de los familiares y amigos. 

Más de 4.300 el año pasado

El año pasado los Mossos gestionaron 4.378 desapariciones, una media de 365 mensuales, de las que el 94% se resolvieron en un mes. Un 35% correspondían a menores de entre 13 y 17 años. En el total de España desde el 2010 se han presentado 40.918 denuncias de menores que han salido de centros tutelados, lo que supone más del 20% de las 202.529 denuncias por desaparición presentadas en la última década. En muchos casos eran reincidentes (121.133) y pudieron resolver rápidamente, aunque según el último informe del Centro Nacional de Desaparecidos sigue habiendo 5.529 búsquedas activas.

El confinamiento, como apunta la psicóloga clínica Margarita Barranco, agrava el estrés que ya sufren estas familias. "Las personas que tienen algún familiar desaparecido, ya lo pasan mal porque la situación de incertidumbre es muy grande y esto genera mucha angustia y, por tanto, dificultades para dormir y descansar de forma adecuada -apunta-. Si a esta situación le añadimos el hecho del actual confinamiento, que muchas personas han dejado de trabajar o de hacer las ocupaciones que tenían diariamente y ahora se encuentran en casa encerradas, esto hace que las personas le den muchas más vueltas a la cabeza y esto puede aumentar la angustia y el malestar y que algunes terminen viendo cosas que igual no son ni reales".

"Al no poder salir a buscar a sus familiares a la calle, el sentimiento de impotencia crece en muchos afectados", explica Lobatón

"A la incertidumbre que llevan viviendo de manera directa, en muchos casos por espacio de meses, años e incluso décadas, se añade ahora la incertidumbre global por la crisis del coronavirus. En las familias se mantiene y se agrava el trauma -coincide Paco Lobatón-. El obligado confinamiento genera un sentimiento añadido de impotencia al no poder salir a la calle para seguir buscando a sus seres queridos, la interrupción del contacto con los investigadores, la sensación de un parón a sus casos". Periodista que lleva más de dos décadas implicado en esta causa e impulsor de QSD Global, fundación europea por las personas desaparecidas, relata que en estos días "la mayoría de estas familias ha incrementado el uso de las redes y grupos de contacto que les mantienen unidas, para intercambiar consejos y transmitirse ánimos".

Las asociaciones de desaparecidos mantienen ahora el contacto con las familias a través del telefóno y redes sociales. Patricia Petit, secretaria de Afades, explica que los Mossos les llaman para saber cómo lo llevan y darles apoyo. Sus encuentros presenciales se reprenderán pasada esta crisis, igual que la reunión interdepartamental de la Generalitat, prevista el 16 de marzo, y con representantes de las 'conselleries' de Interior, Salut, Treball, Afers Socials y Educació, junto con representantes de las entidades. Un encuentro en el que Montserrat Torruella, presidenta de Inter-SOS, cree que habrá que hacer hincapié en el ámbito de la prevención y en "la conveniencia de hacer un mapa de recursos para atender a las familias desde la proximidad y un protocolo de acompañamiento para los profesionales que tengan que hacer esta atención".