Elecciones generales: 11 medidas para la infancia

Miles de niños y niñas viven a diario y en silencio diferentes tipos de violencia como el acoso escolar, el ciberacoso, el maltrato físico o los abusos sexuales. Unas experiencias traumáticas que marcan para siempre sus vidas. Aun así, las políticas no atienden esta especial vulnerabilidad ni ponen el foco en la prevención, por lo que ser menor de edad es un factor de riesgo frente a la violencia

También lo es frente a la desigualdad: más de dos millones de niños y niñas viven en situación de pobreza o exclusión social en el conjunto del Estado. Menores que viven en familias que no pueden cubrir sus necesidades básicas. Y miramos más allá, la prospección de futuro no alberga mucha esperanza ya que según datos de Save the Children, uno de cada cuatro niños permanecerá en situación de pobreza en 2030 si no se adoptan medidas para combatirlo. El coste de no hacer nada es del 5% del PIB y combatir la pobreza y desigualdad infantil supondría el 2,4%. Así pues, ¿por qué no nos ponemos manos a la obra?

Uno de los colectivos más vulnerables son los niños y niñas que llegan solos después de migrar de sus países de origen. Niños que han hecho un trayecto durísimo para llegar hasta aquí para tener un futuro mejor y que, muchas veces, ven como se antepone su condición de extranjero a la de niño. Esto no solo vulnera flagrantemente sus derechos, sino que les aboca a la marginalidad. 

Pero, ¿quién se acuerda de los niños y niñas cuando hay elecciones? En ocasiones, por el hecho circunstancial de ser menores de edad y, por lo tanto, ciudadanos sin derecho a voto, los niños y niñas son los grandes olvidados en las campañas electorales. Pero, aunque no voten, no pueden estar ausentes del debate político porque su situación de especial vulnerabilidad hace imprescindible que sus intereses y necesidades sean puestos en valor. Por eso des de Save the Children proponemos 11 medidas concretas que mejorarían la vida de miles de niñas y niños. Medidas que tienen como objetivo reducir la desigualdad, la segregación escolar o mejorar la protección de la infancia frente a la violencia. Es urgente que pongamos en el centro de la acción política a quienes más nos necesitan.

Medidas para combatir la violencia contra la infancia

1. Aprobar la Ley de Protección contra la Violencia de la Infancia y Adolescencia.

Medidas para combatir la pobreza y la desigualdad infantil

1. Aumento progresivo de la prestación por hijo a cargo hasta alcanzar, en el año 2022, los 1.200 euros anuales por cada niño o niña (menores de 18 años), condicionada a un límite de ingresos basado en los umbrales oficiales de pobreza.
2. Establecer un único concepto de familia monomarental para todas las administraciones, lo suficientemente flexible como para que se recojan las diversas situaciones en que puedan encontrarse familias de este tipo, pero que facilite el desarrollo de políticas específicas para este colectivo.
3. Poner en marcha un plan de extensión de la educación infantil 0-3 años que priorice el acceso a ella de niños y niñas desfavorecidos.

Medidas para un sistema educativo más equitativo

1. Aumentar la financiación del sistema estatal de becas y ayudas, así como reformar sus criterios para que las ayudas sean un derecho subjetivo en todas las etapas.
2. Desarrollar un plan estatal contra la segregación escolar de manera conjunta con las comunidades autónomas en el seno de la Conferencia Sectorial.

Medidas para mejorar la acogida, atención e inclusión de la infancia migrante y refugiada

1. Desarrollar una estrategia integral para la protección de la infancia migrante y refugiada no acompañada.
2. Introducir estándares de calidad mínimos y comunes para todos los sistemas de protección en la Ley de Protección Jurídica del Menor.
3. Adoptar por ley un nuevo procedimiento de determinación de la edad para estimar de manera holística y garantista la edad de los niños y las niñas migrantes y refugiados que llegan solos y sin documentación a España.

Medidas para proteger a la infancia en conflictos armados

1. Poner fin a la venta de armas a países en conflicto donde se puedan cometer violaciones graves de los derechos humanos.
2. Mantener el compromiso de España con la Declaración de Escuelas Seguras y adoptar medidas concretas para su implementación.