La renuncia de la directora del suplemento femenino del diario del Vaticano provoca indignación en Italia

La intelectual feminista Lucetta Scaraffia, quien recientemente arrojó luz sobre los históricos abusos del clero católico contra las monjas, ha dimitido de su puesto como directora del suplemento femenino del diario vaticano 'L’Osservatore Romano'. Scaraffia, cuya renuncia ha ido acompañada por la dimisión en masa de las 11 mujeres que integraban la publicación 'Mujeres, Iglesia, Mundo', ha explicado que su decisión se debe a que se han sentido descalificadas por el nuevo equipo de comunicación del Vaticano. 

La noticia fue dada por la misma Scaraffia quien, en una emotiva carta difundida el martes, explicó cómo, después de siete años de fundar el suplemento, se llegó a querer volver “a la costumbre anticuada y árida de elegir desde arriba, bajo el control directo del hombre, de colaboradores que aseguran obediencia”. “Tiramos la toalla porque nos sentimos rodeadas por un clima de desconfianza y deslegitimación progresiva”, ha escrito Scaraffia.

La intelectual, una profesora de Historia Contemporánea y miembro del Comité Nacional de Bioética de Italia, ha sugerido de esta manera un intento de censurar su trabajo, después de que en febrero denunciase los maltratos que sufren las monjas. Un asunto sobre el que “ya no podíamos guardar silencio”, ha explicado. 

“Como usted bien sabe, no fuimos las primeras en hablar, como quizás deberíamos haberlo hecho, de las graves denuncias de explotación a las que han sido y son sometidas muchas mujeres consagradas (tanto en la servidumbre como en el abuso sexual), pero lo hemos dicho después”, ha afirmado, dirigiéndose directamente al papa Francisco.

Las palabras del Papa

Pese a que en años anteriores Scaraffia había denunciado ataques de miembros de la curia romana por sus artículos, Scaraffia resistió en su puesto hasta perder uno de sus últimos aliados con la salida en diciembre del anterior director de 'L’Osservatore Romano', Giovanni Maria Vian, según llegó a denunciar ella misma en numerosos encuentros con colegas periodistas. Un cambio que se produjo tras el nombramiento del italiano Paolo Ruffini como nuevo prefecto de Comunicación. Después de eso, el Papa llegó a afirmar que “cualquier feminismo termina siendo un machismo con falda”. 

En estas circunstancias, el caso ha provocado indignación y desconsuelo en Italia, en particular en muchas comunidades femeninas de la Iglesia católica, que por mucho tiempo guardaron, sumisamente, silencio. Por el contrario, Andrea Monda, el nuevo director de L’Osservatore Romano y responsable directo de la renuncia de Scaraffia (llegó a pedir de dirigir él el suplemento, según la mujer), ha rechazado toda acusación y ha dicho que el suplemento "seguirá adelante”. Eso sí, sin su resistencia feminista.