ANTE EL 8M... Y EL 19M

El feminismo planta su ninot en las Fallas

La figura de Frida Kahlo  del artista fallero Manolo Algarra en las fallas de Valencia

La figura de Frida Kahlo del artista fallero Manolo Algarra en las fallas de Valencia / Miguel Lorenzo

Nacho Herrero

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Hace algo más de un año, el Consell de les Dones de València encendió mecha al crear una comisión para estudiar el tratamiento de la mujer en los monumentos falleros. El anuncio hizo estallar un acalorado y mediático debate, con más impresiones que datos, que ha desembocado para estas inminentes Fallas, avivado por el innegable éxito del pasado 8M, en la multiplicación de los ninots y la temática feminista pero también la realización de un concienzudo estudio de las fiestas de la ciudad desde una perspectiva de género. Un doble éxito para el movimiento feminista, tanto en visibilidad como en incidencia en la agenda.

El encargo del informe, presentado hace unas semanas, llegó al Departamento de Sociología y Antropología Social de la Universitat de València y su diagnóstico es claro. “Pese a los avances en los últimos años en sentido de una mayor igualdad de género en las Fallas existe todavía una gran diferencia en la participación y en los roles de hombres y mujeres”, sentencia un estudio que analizó tanto los monumentos de 2018 como la composición de las directivas y el reparto de tareas en las diferentes comisiones o de la Junta Central Fallera, el organismo que dirige la fiesta.

Los datos queman

“De entre todos los datos me quedo con que el 88% de los presidentes de comisión son hombres frente al 12% de mujeres y el de que el 88% de las delegaciones infantiles las ocupan mujeres frente a un 12% de hombres. Es el ‘ying’ y el ‘yang’, el dato que resume todos, el que muestra quién ocupa las posiciones de prestigio, poder y gestión y quién ejerce los roles más invisibilizados, que no menos importantes, que no están igual de valorados”, explica a EL PERIÓDICO Verònica Gisbert, autora del informe junto a Joaquím Rius. Sin ser tan abrumador, el 67% de los cargos de la JCF también los ocupan hombres y es ese órgano el que marca el camino.

Hay más datos, claro, unos aún más desnivelados, como el de que el 96% de los artistas falleros son hombres, y otros que muestran ciertos avances, como el de que la contabilidad de las comisiones ya se reparte casi al cincuenta por ciento.

Pero todo eso ocurre dentro de los ‘casales’, lo que se ve está fuera y son, principalmente los monumentos y la balanza también está claramente desnivelada. Un grupo de catorce personas se patearon la ciudad de arriba abajo la pasada semana fallera, sorteando puestos de ‘bunyols’ para concluir que el 48% de los remates (el monumentos principal) y 71% de los ninots eran masculinos frente al 26% y el 9% respectivamente.

No es sólo cuestión de cantidad. El 63% de las apariciones femeninas fueron con un cuerpo hipersexualizado. “Se trataba de cuerpos mucho más voluminosos y muy sexualizados, al contrario que los de los hombres. Pero también miramos el rol que hay detrás de cada cuerpo. El de los hombres musculosos se justifica porque representan guerreros, reyes o figuras públicas importantes, en el caso de las mujeres no hay nada más allá del cuerpo, es pura estética”, explica Gisbert.

El influjo de La Manada

El estudio también recoge entrevistas y dinámicas de grupo con agentes falleros en las que se reproduce el debate social exterior pero de las, a raíz del caso de La Manada en Sanfermines, emergió también la idea de que “existen dificultades para admitir que hay agresiones y violencia contras las mujeres en las fiestas” que se concentran en “la reticencia a ir contra el espíritu festivo”, en “el miedo a ofrecer una imagen mala de València y de las Fallas en particular” y en “la mayor tolerancia que existe en fiestas ante este tipo de actos”.

Monumentos con género

Todas estas polémicas tendrá su propio reflejo en los ninots de este año, en los que no faltan reivindicaciones del movimiento ni críticas a los que algunos entienden como una censura. Pero incluso habrá fallas enteras con temática feminista como la de Almirante Cadarso-Conde Altea, que en la ‘Sección Especial’ (la más importante) que aprovecha el año electoral para en 'Votes for women' volver la vista atrás y reinvindicar la lucha por el sufragio femenino.

“Las reivindicaciones feministas están en auge y hacemos un poco de historia de cómo fueron estos primeros proyectos como el de las primeras sufragistas”, explica el artista fallero Manolo Algarra“Representamos a las tres generaciones que lo movieron todo y a todos los sectores sociales que estaban en contra, que eran todos, la Iglesia, los medios, el capitalismo, el orden público, el mundo obrero…”, explica.

Pero Algarra le da casi tanta importancia a las escenas que rodearán al monumento principal y a su origen. “Hicimos unas charlas en la comisión con las mujeres. Cada una sacó lo que tenía y de ahí salió la escena del techo de cristal que siempre han tenido y parece que están rompiendo o la fábula de la liebre y la tortuga porque decían que cuando salían para trabajar lo hacían con la casa a cuestas, tenían que sortear un montón de obstáculos y además salir perfectas, al contrario que sus maridos”, recuerda.