Las muñecas Bellies, L.O.L. y Ksimerito, las reinas de estas fiestas

Las muñecas son, como cada año, las reinas indiscutibles de estas Navidades con la particularidad de que entre las preferidas figuran algunas de muy reducidas dimensiones. Las L.O.L. (Giochi Preziosi), unas bolas que incluyen una muñeca sorpresa, repiten este año podio en Catalunya, y en toda España, en fuerte competencia con otras miniaturas que causan furor: los Ksimerito (Cife Emotion), de origen mexicano, que buscan recrear la experiencia de cuidar a un recién nacido, y los bebés The Bellies (Famosa), unos muñecos interactivos a los que, cuando se les quita el cordón umbilical, les late el corazón y empiezan a balbucear. Estos últimos arrasan entre las crías de 3 a 6 años.

También en el ‘top ten’ figuran las miniaturas de la Casa de Campo Sylvanian Families, y no faltan las veteranas Nancy (un día como youtuber) y Barbie (paseando a sus perritos).

No es de extrañar que las muñecas copen los puestos de honor del ranking de las preferencias infantiles, pues en España alcanzan el 16% del mercado global de juguetes, mientras en el resto de países europeos la proporción desciende a entre el 7 y el 12%, según un estudio realizado por NPD Group.

Maletín de herramientas Bosch

Entre las estrellas de estas fiestas figura este regalo ideal para que los más pequeños se vayan familiarizando con los artilugios necesarios para los arreglos caseros. Cuesta unos 30 euros y consta de un atornillador y otras herramientas como martillo, sierra, llaves… Potencia las habilidades manuales y la creatividad, y está dirigido a críos de 7 a 9 años.

Vagón maletín con coches Roll Run

El camión de Roll Run que transporta 12 coches (recomendado de 3 a 8 años) se ha convertido en uno de los juguetes que más se arrimará a los árboles navideños estos días. También entre los más solicitados están el Centro de Control Móvil Lego City, un juego de construcción apropiado para niños de 6 a 12 años, a los que propone atrapar a un ladrón y devolverlo a su celda (cuesta 30 euros), y el Perplexus Rookie, un divertimento de habilidad a modo de puzle en 3D.

Sin palabras junior

Divertido juego de mesa para reunir a la familia (se recomienda a partir de los 6 años). Incluye unas gafas distorsionantes que complican la tarea de dibujar, una de las habilidades que se potencian, además de la gestualidad. Los participantes (de 4 a 16) compiten para acertar más rápido las palabras sin decir ni mú. Cuesta unos 37 euros y es de Goliath Games.

Slime

El ‘slime’, una masa esponjosa y elástica (versión sofisticada del moco verde o Blandiblú de antaño) se ha convertido en uno de los fenómenos del año entre los pequeños. Los críos pueden elaborar esa sustancia viscosa utilizando diferentes ingredientes, desde arcillas a pegamentos o purpurinas. La OCU ha advertido de que el ácido bórico, ingrediente de este divertimento, puede resultar tóxico.