La Eurocámara impulsa el autoconsumo energético

El Parlamento Europeo aprueba una cuota de renovables del 32% para 2030

Apuesta por las renovables 8Un parque eólico marino cerca de la isla danesa de Samso.

Apuesta por las renovables 8Un parque eólico marino cerca de la isla danesa de Samso.

Ana García / Bruselas

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En el 2030 las energías renovables representarán al menos 32% del consumo total de la UE y la eficiencia energética deberá haber mejorado en un 32,5%.  Son los ambiciosos objetivos que ha adoptado la Eurocámara con 495 votos a favor y 68 en contra en el primer caso y con 434 votos a favor frente a 104 en el segundo. Los objetivos se revisarán antes del 2023 pero estos solo podrán elevarse, no reducirse. La UE avanza así hacia un modelo energético limpio y sostenible, situando a los ciudadanos “en el corazón de su política energética”.

“Hoy podemos afirmar que Europa está dando respuestas a la altura del desafío del cambio climático” ha afirmado el ponente socialista José Blanco López. Los populares europeos también han celebrado el resultado de la votación: “Es una victoria tanto para el clima como para la billetera ", ha dicho el portavoz popular de la comisión parlamentaria de Industria, Krišjānis Kariņš.

Por su parte, el eurodiputado de EQUO, Florent Marcellesi, ha destacado la creación de nuevos empleos que traerá la Directiva, hasta 840.000 posibles puestos según la Comisión, y su impacto sobre la ciudadanía: “Trabajemos para seguir elevando el nivel de ambición y para que la ciudadanía sea la verdadera protagonista de esta revolución energética a través de un modelo energético más democrático, justo y descentralizado".

Aunque no solo han habido aplausos, desde Izquierda Unida califican la Directiva como “insuficiente”. La eurodiputada de izquierda unitaria, Paloma López, ha señalado durante su intervención que, frente al auge de la extrema derecha en países como Brasil o Estados Unidos, es preciso un compromiso mayor de la UE y ha denunciado que el Consejo "ha frenado reformas importantes” en materias como transporte y biofueles.

Abaratamiento de la factura y luz verde al autoconsumo

El paquete de medidas tendrá un impacto directo sobre el consumidor. El aumento de la eficiencia energética abaratará la factura eléctrica a las familias europeas y los Estados miembros estarán obligados a introducir medidas específicas para combatir la pobreza energética.

Además, los particulares tendrán luz verde para producir su propia energía, almacenar y vender la que no necesiten. “Hemos logrado reforzar el autoconsumo y producción como un derecho, y ha quedado clara la voluntad del Parlamento de prohibir los gravámenes o cargos al autoconsumo hasta 2026” ha dicho Blanco.

Independencia energética y biocombustibles de segunda generación

Gracias al fomento de la eficiencia energética los Estados miembros reducirán su dependencia del petróleo y del gas importado, un objetivo que responde a las aspiraciones de independencia energética que desde hace años coge protagonismo en la agenda europea. 

En el sector de los transportes, se ha establecido que al menos el 14% del combustible proceda de fuentes renovables. Los biocombustibles de segunda generación (producidos por materias primas sostenibles) pueden jugar un papel importante en la lucha contra el carbono en este sector, mientras que los biocarburantes de primera generación (hechos por medio de azúcar, almidón o aceite vegetal en cultivos alimentarios) irán perdiendo peso de forma gradual hasta quedar totalmente fuera de estos objetivos en 2030.

Gobernanza de la Unión de la Energía

La Eurocámara también ha aprobado una nueva gobernanza de la Unión de la Energía, con 475 votos a favor y 100 en contra. A partir de 2019 cada Estado miembro tendrá que presentar planes a diez años sobre energía y clima, estableciendo objetivos nacionales y medidas concretas.

La UE quiere que todos los países se comprometan con los objetivos climáticos, aunque desde el grupo popular recuerdan que “el equilibrio y el realismo son importantes” y acogen “con satisfacción el grado de flexibilidad que se incluye en el acuerdo: es un elemento clave”, ha dicho Kariņš.