Localizado un quinto cadáver de la patera encallada en Cádiz

La inmigración irregular se coló ayer en la campaña electoral andaluza a cuenta del naufragio de una patera el lunes en Cádiz, que dejó cuatro muertos y al menos 17 desaparecidos. Mientras los agentes de la Guardia Civil localizaban en el mar el cuerpo de un quinto magrebí, el líder del PP andaluz, Juan Manuel Moreno Bonilla, responsabilizaba de lo ocurrido al “efecto llamada” que, a su juicio, provocó la acogida del Aquarius. “Hay que apelar y recordar la enorme irresponsabilidad del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que recién llegado a la Presidencia hizo una serie de gestos de cara a la galería para convertir un drama humano en un activo electoral que ha salido caro”, señaló.

Desde primera hora de la mañana los servicios de rescate retomaron el dispositivo de búsqueda de los ocupantes de la patera de madera encallada en la playa de Los Caños de Meca (Barbate). A media mañana localizaron uno de los cuerpos flotando en el agua. Los inmigrantes no llevaban chaleco salvavidas, una forma de abaratar el pasaje, y muchos no sabían nadar. El cóctel mortal se completó con la elección de la ruta: un paraje repleto de arrecifes en la línea de playa que atrapó la embarcación y la volcó, aún de noche. La Guardia Civil logró encontrar a 22 supervivientes, todos ellos varones y muchos de ellos menores de edad, y estos relataron que a bordo iban entre 40 y 45 personas. No obstante, no pudieron precisar si lograron alcanzar tierra como ellos y se ocultaron para evitar ser detenidos y devueltos a sus países, o si se ahogaron al caer al mar.

La búsqueda de la Guardia Civil y Salvamento Marítimo continúa por tierra, mar y aire, aunque fuentes del dispositivo citadas por Efe expresaron su temor de que con el frío los cuerpos quedaran petrificados y se hundieran, por lo que tardarán varios días aún en salir a flote.

Desde la Asociación Pro Derechos Humanos (APDH) en Cádiz condenaron el naufragio y señalaron a los Gobiernos de España y de la UE “como responsables de las muertes en el Estrecho de Gibraltar” por no implantar “vías legales y seguras”. “Todo lo que no sea eso, será repetir lo mismo una y otra vez”, señaló Rafael Lara, portavoz de la asociación en Cádiz, quien elevó a 629 los muertos y desaparecidos en pateras en lo que va de año. “La sociedad civil no puede permanecer indiferente ante esta masacre”, subrayó, reprochando que el gobierno socialista “hace lo mismo que se venía haciendo desde siempre: caos y descontrol este verano, falta de medios y de recursos, trato indigno a inmigrantes y alcaldes intentando solucionar la situación". “Hace falta reconsiderar esas políticas de muerte que los inmigrantes llevan 30 años sufriendo”, remató.