PROTECCIÓN DEL MEDIOAMBIENTE

Las últimas lluvias dan un respiro a los bosques de cara a la campaña forestal

Urbanización La Guàrdia, entre los muncipios de Artès y Moià.

Urbanización La Guàrdia, entre los muncipios de Artès y Moià. / periodico

Cristina Buesa

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La expresión "como agua de mayo" evoca los beneficios para la agricultura que tiene que llueva este mes ya que garantiza las cosechas del verano. Pero las precipitaciones en estas semanas son también claves para los responsables de la prevención extinción de incendios forestales para saber qué campaña se prevé. Es entonces, tras las aguas de mayo, cuando se analiza el índice de sequía y se elabora el mapa de los Grups d'Actuacions Forestals (GRAF) de los Bombers, que permite actuar en consecuencia.

"Somos relativamente optimistas aunque tendremos que estar atentos a las olas de calor y al viento", ha analizado el jefe de la región de emergencias Metropolitana Sud de Bombers de la Generalitat, Joan Rovira. El bombero también ha avisado de que el sur de Catalunya padece un déficit hídrico desde hace años, que las lluvias del pasado invierno y la primavera aún no han solucionado.

Veranos siempre malos

Junto a Rovira estaba otra de las voces autorizadas en este campo, la de los agentes rurales. El jefe regional del cuerpo, Jaume Torralba, ha preferido ser algo menos optimista. "En las campañas forestales los veranos se preparan como si siempre fueran a ser malos", ha expuesto. Las agrupaciones de defensa forestal (ADF), representadas por el presidente del secretariado en Catalunya, Xavier Jovés, han añadido que, a pesar de que la pluviometría da buenos presagios, hay que estar vigilante.

"Las ADF preferimos explicar cómo prevenir los fuegos que no apagarlos", confiesa un responsable

"Las ADF preferimos ir por los municipios explicando cómo prevenir los incendios que no apagándolos", ha resuelto Jovés. Tanto su organización como los rurales o bomberos coinciden en que la sensibilización de la ciudadanía es clave, algo que desde las administraciones trabajan desde hace tiempo.

Un paso más

El vicepresidente primero y responsable del área de Territori i Sostenibilitat de la Diputació de BarcelonaDionís Guiteras, ha recordado que desde 1987 se ha invertido 112 millones de euros en programas de prevención de incendios forestales, ayudando a los ayuntamientos y ADF en limpieza de caminos o ejecución de franjas perimetrales en las urbanizaciones para protegerlas.

"Hay que dar un paso más", ha invitado Guiteras. Más allá de la colaboración institucional o la inyección de fondos, hay una tarea social a desarrollar. Por ejemplo, haciendo entender a la ciudadanía que cuando se talan o desbrozan bosques "no se está cometiendo un atentado ecológico sino ayudando a que los bosques crezcan sanos", ha defendido.

El alcalde de Vacarisses presume de la recuperación de la actividad ganadera

El papel de los agricultores y ganaderos es igualmente esencial. No solo porque su presencia permite que el espacio natural esté ocupado y cuidado sino también porque generan actividad económica, productos de proximidad y un consumo responsable, un círculo virtuoso. La explicación de estas ventajas, además del relato sobre lo que ya se ha hecho en los bosques catalanes, podrá verse este sábado en Vacarisses (Vallès Occidental) el día de la prevención de incendios forestales, que se celebra por primera vez en colaboración con la Fundació Pau Costa.

"En nuestro municipio habían desaparecido los payeses y con la creación del parque rural ya hay dos rebaños", ha subrayado orgulloso su alcalde, Toni Masana.