MECANISMO INFRAUTILIZADO

Los abogados rescatan del olvido la ley de la segunda oportunidad para insolventes

Alexandra Colominas, este miércoles, en el Col.legi de l'Advocacia de Barcelona.

Alexandra Colominas, este miércoles, en el Col.legi de l'Advocacia de Barcelona. / .42982568

J. G. Albalat

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Empezar de cero y sin deudas imposibles de finiquitar. Esto puede ser una realidad gracias a la ley de segunda oportunidad aprobada por el Gobierno del PP en el 2015. Sin embargo, es una herramienta infrautilizada. ¿Motivo? La Administración no la ha divulgado y la mayoría de ciudadanos no saben de su existencia. Los abogados catalanes se han propuesto rescatarla del olvido y han iniciado una campaña para darla a conocer e impulsar su uso. En Catalunya se tramitaron en el 2017 un total de 450 procedimientos de ese tipo, de los 1.270 que se registraron en España. En Francia, en cambio, la cifra es mucho más elevada: 180.000 casos al año. Y en Alemania, 107.000.

A esta ley se han acogido personas que deben hacer frente a una deuda con el banco después de ser desahuciado por el impago de un préstamo hipotecario y no tienen ninguna posibilidad de liquidarla, consumidores que han recurrido a entidades prestamistas y compran más de lo que su economía se lo permite o pequeños empresarios empredores castigados por la crisis económica y que no han podido hacer frente a sus obligaciones con los acreedores.  El pasivo no puede superar los cinco millones de euros.

El sistema consta de dos fases: primero, se intenta un acuerdo extrajudicial y, si no se pacta, se recurre al juez para solicitar la exoneración de deuda o de una parte de ella. Eso sí, antes el afectado tiene que acreditar sus insolvencia y vender su patrimonio. 

Campaña de los colegios profesionales

El Col.legi de l’Advocacia de Barcelona y el Consell de l’Advocacia Catalana se han puesto manos a la obra para impulsar el uso de esta ley que, según han explicado este miércoles los máximos responsables de esas las citadas instituciones, Maria Eugènia Gay y Julio J. Naveira, es una gran desconocida para la mayoría de los ciudadanos. Los abogados consideran que el sistema es “simple y accesible” y “una buena herramienta para dar solución a situaciones graves de sobreendeudamiento que impide a muchas familias llevar una vida digna”. A pesar de ello, en su opinión, es  un recurso “infrautilizado” por el desconocimiento que existe sobre esta normativa. De ahí la campaña de publicidad y un cuestionario con 25 preguntas frecuentes que se pueden encontrar en la página www.segonaoportunitat2018.cat y la organización de cursos de formación para profesionales del Derecho. La ayuda del abogado es necesaria para llevar a cabo los trámites.

Los abogados también trabajan en propuestas para mejorar la ley y, en concreto, en extender la asistencia jurídica gratuita a la segunda oportunidad. La asistencia de un abogado del turno de oficio sí que entra en esta cobertura si se cumplen los requisitos, pero no los notarios. Estos profesionales son una pieza esencial en la primera fase de proceso: intentar un acuerdo extrajudicial. A ellos se acude solicitando un mediador.

Alexandra Colominas, de 31 años, ha podido beneficiarse de esta segunda oportunidad. Era propietaria de centros de formación profesional, pero la crisis económica propició que tuviera que cerrar y con una deuda de 350.000 euros a sus espaldas, al haber avalado con su patrimonio el negocio. “Intenté salir a flote, pero la pelota cada vez se hizo más grande”, recuerda. Fue entonces cuando acudió a un despacho de abogados y empezó el proceso para eximirle de pagar a los acreedores . En 10 meses, el juez resolvió a su favor. “He empezado de cero y ahora estoy montando otro negocio. Vuelvo a ser feliz”, sentencia.

Hombre, de entre 35 y 45 años y con una deuda de más de 100.000 euros

No hay estadísticas fiables sobre las personas que se han acogido hasta ahora a la ley de la segunda oportunidad, con lo cual es difícil hacer un perfil de los afectados, ha reconocido <strong>Martí Batllori</strong>, coordinador del grupo experto en la materia. De ahí que se deba recurrir a los casos que cada uno de los abogados han llevado. Según <strong>Yvonne Pavía,</strong> diputada del Col.legi de l’Advocacia de Barcelona, el prototipo es un consumidor hombre, de 35 a 45 años de edad, con un salario entre los 1.000 y 1.500 euros y que se ha gastado más de lo que puede.  La deuda media ronda entre los 100.000 y los 200.000 euros.  Después están los que sufren un desahucio y deben pagar todavía al banco y los  empresarios que avalan con su patrimonio su negocio, afirma el <strong>economista Octavio Gracia</strong>.