El joven que pateó a una mujer no irá a la cárcel y asistirá a cursos antiviolencia

J. G. Albalat

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"Uno, dos y tres", contó, marcha atrás, con los dedos de una mano. Tomó carrerilla, se lanzó hacia una mujer y le propinó una brutal patada por la espalda. Mario García, el joven que el 22 de febrero del 2015 protagonizó la agresión en la avenida Diagonal de Barcelona como parte de una "broma", ha sido condenado este miércoles a un año y medio de prisión, tras la aceptación de la acusación. La jueza, sin embargo, ha suspendido su ingreso en un centro penitenciario a cambio de la asistencia a cursillos de aceptación a la diversidad, especialmente en asuntos de género, y otro de prevención de los comportamientos violentos y que no vuelvan a delinquir. La vítima, que estuvo 75 días de baja, percibirá una indemnización de 48.000 euros por daños físicos y morales.

En la vista celebrada en la Ciutat de la Justicia, el acusado, vecino de Talavera de la Reina (Toledo), ha aceptado su culpabilidad y ha asumido una decisión que evita su ingreso en prisión. El fiscal de delitos de odio, Miguel Ángel Aguilar, reclamaba inicialmente para él tres años de prisión, pero este miércoles ha rebajado su petición de cárcel, tras un acuerdo con la defensa y el reconocimiento de los hechos por parte de Mario García y su amigo, Álvaro Gegrera, que grabó el video difundido por internet.

Condenado también el autor del vídeo

Así, el fiscal ha solicitado para García un año y medio de cárcel y para Gregera un año de prisión por delitos contra la integridad moral y lesiones, con la agravante de alevosía y discriminación por sexo, al considerar "el afán de humillar y ridiculizar a una mujer por el mero hecho de serlo". También ha instado la aplicación de la atenuante de reparación del daño, al haber depositado los investigados en el juzgado la cuantía de la indemnización a la víctima, que se ha fijado en 48.000 euros por las lesiones y por el daño moral que la agresión supuso para la víctima y el resto de mujeres y la difusión del vídeo en internet. La fiscalía, además, ha solicitado que se prohiba a los acusados a acercarse o comunicarse con la mujer agredida.

La jueza ha dictado sentencia 'in voce' en estos mismos términos y ha ordenado que se tomen medidas para la retirada del vídeo de internet. Después ha suspendido la ejecución de la condena a cambio de la asistencia a los cursillos.

El infausto vídeo se hizo tristemente viral. En las imágenes se veía una mujer, esperando para cruzar la calle en la avenida Diagonal a la altura de la calle Enric Granados, ajena a lo que ocurría a su espalda, y al joven cogiendo carrerilla para propinarle una fuerte patada a su víctima. La agresión hizo que la mujer cayera al suelo y sufriera un esguince, hematomas en la rodilla y muñeca izquierdas y dolor en las cervicales. Cinco días después del suceso, el agresor declaró en la Comisaría de Talavera, después de que los jóvenes borrasen el vídeo de YouTube y eliminaran sus perfiles en todas las redes sociales.

Veloz carrera

Para el fiscal, el joven talaverano "contó marcha atrás con los dedos de su mano y acto seguido emprendió veloz carrera, directa hacia las jóvenes, propinando por la espalda, y sin posibilidad de reacción por parte de ninguna de ella, una brutal patada, inclinando para ello su pierna para disponer de más fuerza y poder impactar con más energía, en el tobillo derecho de N.G.S."

Esta patada, según apunta la acusación pública, provocó que cayera "derrumbada fulgurantemente al suelo", a lo que añade que todo sucedió "entre carcajadas" de los autores de los hechos. La agredida, a nivel psicológico, "presenta estrés post traumático en relación a la agresión sufrida, con indicadores como el aumento de la desconfianza a las intenciones de los otros, rabia por la incomprensión de la violencia gratuita y no sentirse ayudada en el momento de los hechos por la gente que fue testigo de los mismos".