No es fácil ser menor extranjero no acompañado en España

Save-the-children-menas

Save-the-children-menas / Pedro Armestre

MIREIA RECASENS. SAVE THE CHILDREN

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Son menores, extranjeros y llegan solos a España en busca de un futuro mejor. Emigran de sus países de origen huyendo de la pobreza, la violencia, la miseria en viajes extremadamente peligrosos. Una vez aquí, la realidad con la que se encuentran es muy distinta a la que esperaban ya que el sistema antepone a menudo su condición de extranjero a la de niño y los recursos disponibles para atenderlos son limitados y no están adaptados a sus necesidades.

Sólo en 2017 se estima que llegaron a España más de 5.380 menores extranjeros no acompañados (MENA), principalmente procedentes de Marruecos, Argelia y África Subsahariana. Unas cifras que aumentaron drásticamente el año pasado por el incremento en las llegadas por tierra y mar a Ceuta y Melilla. Aun así, este fenómeno es difícil de cuantificar ya que hay veces que estos menores no figuran en ningún registro, o por el contrario, se registran más de una vez por el hecho de haberse desplazado de una región a otra. Se trata de un fenómeno transversal que requiere de respuestas coordinadas.

Debemos tener presente que no se puede saber ni cuándo ni cómo llegarán estos niños, pero por el hecho de encontrarse en España las instituciones públicas de protección a la infancia tienen la responsabilidad de garantizar su bienestar y velar por sus derechos en materia de protección, salud y educación, en igualdad de condiciones que los menores nacidos en España tal y como establece la ley en coherencia con la Convención sobre los Derechos del Niño de Naciones Unidas. 

DERECHO AL TRABAJO

Hay menores extranjeros no acompañados con 16 años que ya están en edad de trabajar y esto es lo único que quieren hacer. Trabajar, conseguir ingresos y poder ser autónomos. Pero no es fácil ser menor extranjero en España y menos aún si no tienes referentes familiares.

Actualmente la legislación española sólo otorga una autorización de residencia sin permiso de trabajo, lo que representa un obstáculo para que estos jóvenes obtengan ingresos, y por lo tanto para que consigan una calidad de vida decente. Además, la ley es inconsistente ya que, por un lado, habla del potencial integrador del trabajo, pero por el otro impide que los menores extranjeros no acompañados puedan trabajar.

Así pues, nos preguntamos, ¿qué potencial integrador tiene el trabajo para estos chicos si no lo pueden llevar a cabo? Y aquí se suma también otra incongruencia ya que se les exige que muestren un ingreso mínimo cuando son adultos, condición sin la cual no pueden renovar la autorización de residencia. Todo eso es claramente discriminatorio en comparación con los niños extranjeros acompañados, comunitarios o nacidos en España que tienen derecho a trabajar desde los 16 años y que impide a los menores extranjeros no acompañados generar ingresos, facilitar su plena autonomía e integración social.

Ante esta situación, Save the Children junto a l’associació Noves Vies y Fundación Raíces presentamos un informe ante el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de la ONU para que pida a España que conceda a los MENA mayores de 16 años una autorización de residencia de larga duración que les permita trabajar, ya que actualmente sus derechos están siendo vulnerados. Para estos jóvenes poder trabajar no sólo significaría salir de una situación de vulnerabilidad sino también integrarse plenamente en la sociedad.