ENTREVISTA

Manuel Barbero: "Los Maristas han comprado a víctimas para acallarlas"

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fsendra42038713 manuel barbero180220125519 / JOAN PUIG

Imma Fernández

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Manuel Barbero, el ‘padre coraje’ que destapó el ‘caso maristas’ e impulsó la investigación sobre el mayor escándalo de pederastia en España, relata su lucha y su vida en ‘Un silencio a gritos’, que presenta este jueves (19.00 horas) en la editorial Comanegra.

¿Por qué ha escrito el libro? Muchos no entienden el porqué de mi lucha. Viene en parte de mi infancia, yo también sufrí abusos. Y además quería denunciar la hipocresía de los políticos e instituciones, que te dan la palmada en la espalda y luego te dejan solo. Ni el fiscal ni el juez ni la policía se han interesado por los correos que he recibido de las víctimas, no han querido implicar a los maristas. 

¿Le indigna más la no implicación de la orden que los abusos cometidos por Joaquim Benítez? Es así. Benítez es una persona más o menos enferma o una persona mala, pero en la institución algunos han permitido un daño irreparable y no se les persigue. La fiscalía no se ha preocupado de saber dónde se cometieron los abusos, cuánto duraron, si eran en horas lectivas... El caso más grande de pederastia en España y se obra así. 

"La fiscalía no se ha preocupado de saber dónde se cometieron los abusos, cuánto duraron, si eran en horas lectivas..."

Retrata usted su dura infancia, un hogar sin alma, sin amor...Éramos ocho hermanos con un padre alcohólico y una madre sin ternura, sin capacidad para amar. Al salir de casa a los 18 años y conocer a mi mujer y su familia, fue mi salvación; me di cuenta del infierno en el que había vivido. Reconozco que tengo carencias afectivas, ese cariño que no he tenido y que me ha costado exteriorizar con mis hijos. Creo que he cambiado algo. 

Ser un hijo no deseado también le marcó. La frase favorita de mi madre era: “Si lo llego a saber, tengo a mis tres hijos mayores y me coso el coño”. Cada día lo repetía. Duele mucho.

¿Han leído el libro su madre y sus hermanos? No tengo relación ni con mi madre ni con mis hermanos. Cuando salieron los abusos no se preocuparon de mi hijo. Son incapaces de amar. ¡Si no ha sabido ser madre cómo va a saber ser abuela! Hace dos años que no me hablo con mi madre y me duele. Es la única persona que me ha cuestionado, diciéndome que era mentira lo de los abusos, que estaba haciendo mucho daño en el barrio... Solo le importa el qué dirán, la mentalidad retrógrada de los pueblos. 

A usted lo violaron en un camión a los 11 años. Sí, estaba con mi hermano gemelo y yo entré, y él se quedó fuera. Salí llorando y nos fuimos corriendo pero solo le dije que aquel hombre había amenazado a los papas, nada más. Creo que ahora al saberlo habrá sentido alguna culpa. Él se salvó.

Lo mantuvo en secreto durante décadas. ¿Entiende, pues, a los que no denuncian? Sí, fue mi secreto hasta que le pasó a mi hijo Toni y se lo conté. Se quedó impactado y nos abrazamos. Me preguntó cómo lo hice para pasar página y le contesté que por supervivencia. Yo tenía que trabajar para sobrevivir, no podía quedarme con la violación rondándome en la cabeza.  

¿Su lucha es por su hijo o por usted? Es la rabia e indignación de decir: ¡otra vez ha pasado! ¡Esto no puede ser! Mi hijo no quería denunciarlo, le resultaba muy duro, pero yo lo creía necesario. 

Cuenta que aún le pesa la culpa por no haber protegido a Toni. Él me culpa y yo también culpo a mi familia por no haberme acompañado y dado cariño. Pero como le digo a mi hijo, él nos tiene a nosotros, una familia, yo no tuve a nadie. La culpa me hace seguir trabajando para restablecer el daño y la confianza con mi hijo. La confianza entre familiares y víctimas lo es todo.

"Le estaba esperando [a Benítez] con una pala en el asiento, pero tardó mucho y me hizo recapacitar"

Cuando supo de los abusos fue a casa de Benítez para matarlo, ¿qué se lo impidió? Que tardó mucho en salir de su casa. Le estaba esperando fuera en el coche, con una pala en el asiento, pero tardó mucho y me hizo recapacitar, empecé a pensar en mis hijos y en mi mujer. Ahora mi hijo también dice que si pudiera, lo mataría, es parte de su rabia interior.

¿Le resulta liberador que Benítez vaya a la cárcel? Es alentador que el fiscal pida 22 años aunque nosotros lo veamos corto. Pero sigo pensando en todas las víctimas a las que no han dado respuesta. ¿Cómo pretendemos que la gente denuncie si cuando lo hacen se les deja abandonados? Es inaceptable. Mi propio hijo cuando declaró se sintió como un delincuente. Se le cuestionó que fuera verdad, eso es terrible para las víctimas. Se trató mejor a Benítez que a mi hijo.

¿Cómo está Toni? Lleva tres meses bien. Estuvo tres años escondido en su habitación, sin amigos. lo pasó muy mal. Ahora está más fuerte. Ha querido salir a dar la cara en el documental sobre el ‘caso Maristas’ ‘Shootball’, de Fèlix Colomer.

"Es alentador que el fiscal pida 22 años, aunque nosotros lo veamos corto"

Usted mantuvo una larga conversación con Benítez, ¿qué se dijeron? Sale en el documental. Quería que me confesara que los Maristas lo sabían y me lo dijo. Él quiso justificarse diciéndome que su padre era alcohólico, que su infancia fue difícil y también habían abusado de él. Curiosamente, su vida tiene muchos paralelismos con la mía. También eran ocho hermanos y tiene un hermano gemelo, el padre alcohólico... Igual que yo. Intenté cierta empatía, pero es que mientras yo intento hacer el bien todo lo que puedo, él hizo el mal. 

¿Y su otro hijo qué dice? Está hasta las narices del tema. Él también estuvo en los maristas, pero para él el colegio fue fantástico, hizo buenos amigos, También tuvo de profesor a Benítez, pero este es inteligente y sabía a quíén acercarse. Mis hijos son polos opuestos, uno introvertido, otro extrovertido. Le tocó a Toni, que también sufrió bullying.

Doble infierno. Los demás chavales se dieron cuenta de que Benítez abusaba de él y le llamaban ‘maricón’... A veces es más duro el maltrato psicológico que el físico. A mi hijo se le juntó todo y se hundió. 

¿Cuál es su próxima batalla? Voy a desvelar todos los correos que he recibido, en un dosier que enviaré al Congreso, el Parlament y la ONU. Porque hay muchas más personas que sufrieron abusos en los maristas, el doble o triple de las denuncias que han salido a la luz. A Benítez lo han denunciado 17 personas, pero hay muchas más víctimas que no han sido escuchadas, y siguen saliendo.

"Las víctimas deben quitarse la losa de encima, hablar, denunciar, para crear una sociedad más sana"

También ha formado una asociación, Mans Petites. Ya tenemos un local, en la calle de Castelao, 127, de L'Hospitalet. Me he sentido muy solo por parte de las administraciones, aunque por suerte me ha ayudado mucho la prensa, estoy muy agradecido a EL PERIÓDICO. La intención de la asociación es acompañar y atender a quien lo necesite. Las víctimas deben quitarse la losa de encima, hablar, denunciar, para crear una sociedad más sana, para que gente como Benítez no tenga cabida.

¿Qué es lo que más le ha dolido de todo el caso? El silencio de los maristas, había gente que lo sabía. Y los maristas han pagado a las víctimas para acallarlas. En el documental aparece el vicario provincial de la orden religiosa, Pere Ferré. reconociendo que han comprado a víctimas; yo, para que confiese, le llamo diciendo si pueden llegar a un acuerdo conmigo igual que con las víctimas de Badalona y me dice que sí, Es una práctica habitual de la orden. Un despelote que han tapado todas las administraciones. También me pregunto en el libro si la investigación policial no ha pecado de miedo por el gran nombre de maristas. Se deberían depurar responsabilidades. 

Dice que su hijo ahora está orgulloso de usted. ¿Esa es su mayor victoria? Sí, es el mejor premio, Que tu hijo te diga que has hecho algo por él,