Reivindicación

Presión por el instituto escuela

El PSC lleva al Parlament la petición, cada vez más extendida entre las familias, de crear más centros integrados de infantil, primaria y secundaria en Catalunya

zentauroepp40073603 barcelona   barcelones   12 09 2017  sociedad  vuelta al col170915223302

zentauroepp40073603 barcelona barcelones 12 09 2017 sociedad vuelta al col170915223302 / periodico

María Jesús Ibáñez / Barcelona

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El próximo pleno del Parlament debatirá (cuando sea que se celebre) una propuesta del grupo socialista en la que se reclama a la Generalitat que, tal y como prevé la ley de educación de Catalunya (LEC), promueva la creación de nuevos institutos escuela de titularidad pública allí donde exista una demanda. La proposición del PSC coincide con la presión que están ejerciendo, en cada vez más colegios, las familias para que los alumnos que terminan la primaria puedan realizar la secundaria obligatoria (o al menos los primeros cursos) sin tener que cambiar de centro y siguiendo un mismo proyecto pedagógico.

"No estamos reclamando que se abran institutos escuela de forma indiscriminada, por supuesto que no. Se trata de atender las reclamaciones que hacen los propios centros o de estudiar dónde hacen más falta", precisa Esther Niubó, la diputada del PSC que defenderá la petición. "Los anteriores gobiernos de CiU dieron la espalda a los institutos escuela públicos, cuando, en cambio, a través de los conciertos educativos, permitieron que los centros privados sí pudieran aplicar ese modelo de continuidad entre primaria y secundaria", denuncia.

CiU dio la espalda a los institutos escuela públicos, pero a la privada le ayudó a consolidar el modelo

Esther Niubó

— Diputada del PSC en el Parlament

Catalunya cuenta en la actualidad con 25 institutos escuela, de entre los más de 3.400 centros educativos públicos que existen. De ellos, "una docena entraron en funcionamiento en el curso 2010-2011 y los otros seis, el año siguiente", detalla la socialista. Desde entonces, y pese a ser un modelo recogido por la LEC y muy recomendado por los pedagogos, "se han abierto unos pocos más, pero siempre con cuentagotas", afirma. Los tres últimos se han inaugurado este mismo curso 2017-2018, en tres barrios socialmente vulnerables de Barcelona, dentro de un plan de choque educativo para reducir el fracaso escolar en la ciudad. 

En estos momentos, hay demandas para abrir nuevos centros integrados (con educación infantil, primaria y secundaria en un mismo proyecto) en Cerdanyola del VallèsRipolletPolinyàViladecans Montgat, entre otras poblaciones.

Falta de plazas en la ESO

En un momento en que además se avecina un importante incremento de la población escolar en la ESO, los institutos escuela se presentan como una ocasión para remediar "los problemas de masificación que ya empieza a haber en secundaria", asegura la parlamentaria del PSC. "¿Por qué no aprovechamos el contexto demográfico complejo para impulsar institutos escuela allí donde las circunstancias los aconsejen? ¿Por qué no transformamos este déficit en una  oportunidad?", preguntó la diputada Niubó en una interpelación la semana pasada a la 'consellera' de Ensenyament, Clara Ponsatí. 

La idea pasaría porque durante los próximos años se remodelaran espacios que quedasen disponibles en las escuelas de educación infantil y primaria –donde según las previsiones va a registrarse un descenso de población escolar– para adaptarlos a las necesidades de los estudiantes de la ESO. "Sabemos que, por ley, los institutos escuela necesitan más terreno, pero estamos seguros de que ese no es el mayor problema", indica la socialista.

La fórmula podría implantarse, asimismo, en poblaciones de tamaño medio donde no hay instituto público y los niños tienen que viajar a diario a municipios vecinos para cursar la ESO. "No tener que desplazarse cada día a otro pueblo, a los 12 o 13 años, tendría un impacto positivo en el rendimiento de esos niños, por no hablar del tiempo que ganarían para hacer otras actividades", subraya la diputada, que destaca que este es un modelo de éxito en un país de referencia en el mundo educativo como Finlandia.

Un estudio encargado en el 2012 por el Consell Superior d’Avaluació del Sistema Educatiu al profesor de Pedagogía Aplicada de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), Màrius Martínez, concluía que los institutos escuela contribuían a reducir el abandono escolar prematuro. "El paso de la primaria a la secundaria supone un cambio brusco en las asignaturas -que pasan a ser menos transversales y más especializadas- y se diluye el seguimiento directo del alumnado que hacen los maestros en las escuelas", señalaba Martínez. 

No es tan sencillo

La 'consellera' Ponsatí, sin embargo, no se muestra partidaria de generalizar el modelo, "porque no siempre es una garantía de mejora". "De entrada, para unificar un colegio y un instituto deben cumplirse ciertas condiciones y la integración de dos equipos pedagógicos distintos no es sencilla", alegó en su comparecencia ante el pleno del Parlament.

Unificar un colegio y un instituto supone unir dos equipos pedagógicos distintos y eso no es sencillo€

Clara Ponsatí

— 'Consellera' de Ensenyament 

"Que unas cuantas familias pidan un instituto escuela porque están contentos con su colegio de primaria no significa que la Generalitat tenga que atenderles sin valorar con detenimiento los pros y los contras de la solicitud", advirtió.

El reto: evitar que sea una fórmula de estigmatización

La inauguración de tres nuevos institutos escuela en barrios vulnerables de Barcelona, como medida para reducir el absentismo escolar que se producía cuando los alumnos pasaban del colegio de primaria al instituto, ha puesto el foco en el riesgo de estigmatización que se corre si estos centros solo se abren para atender a alumnos con necesidades educativas. El modelo, aseguran los expertos, es ideal para trabajar de modo innovador.