Carla Torres: "Sé las emociones que transmite el alzhéimer"

La vida puede cambiar en un chasquido. A veces, como esta joven, basta con escuchar tu propia naturaleza.

«Me puse a escribir el corto y no podía parar»_MEDIA_1

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POR
Núria
Navarro

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A los 6 años, Carla Torres (Sant Cugat del Vallès, 2000) escribía guiones y les daba forma echando mano de sus dos sufridos hermanos menores (hoy tienen 14 y 11 años). A los 13 le regalaron el primer móvil y experimentó con los programas de edición que encontraba en la red. Pero acabada la ESO, y zarandeada como toda su generación por esa correntada neoliberal que le patea el trasero a lo artístico, pensó en cursar el bachillerato científico y encaminar sus pasos a Biología. Entonces, escuchó su naturaleza y a sus padres y dio un giro radical.

¿Qué ha pasado en un año? He cambiado de escuela, estudio bachillerato artístico y he ganado cinco premios por Alois, un corto sobre el alzhéimer que la Fundación ACE utilizará para explicar la mirada del adolescente sobre la enfermedad.

Menudo cambio. Si mis padres [Carlos y Montse, divorciados] no llegan a decirme «te conocemos, prueba, te gustará», nada de esto habría sucedido. Tengo suerte de tener unos padres como ellos. Y estoy orgullosa del corto.

El tema no es 'un fin de semana con las amigas' precisamente. Cuando le expliqué la idea al profesor de guion me dijo que era muy buena pero muy compleja. Yo quise demostrar que era capaz de escribirla. Al principio no sabía por dónde empezar, pero a la que me puse a escribir no podía parar. El guion se escribió solo. Lo acabé en dos días. El profesor lo leyó, cuatro veces, y me dijo que se quedó impresionado.

Luego tuvo que convencer a las actrices. Le expliqué la idea a Lua Anaya [tiene 19 años y estudia arte dramático], le envié el guion y me propuso que la 'enferma' fuera su madre en la vida real [Tita Roig]. ¡Fantásticas las dos! Para que se entendiera la historia, había muchas escenas, mucho que dirigir, y solo disponíamos de un fin de semana para rodar en el piso de mi padre (nos lo cedió y puso el cátering).

Son 13 minutos hipnóticos. Elegí esta historia porque la conozco. Mi abuela materna tiene alzhéimer. Sé las emociones que te transmite.

Muy tristes. He visto la evolución de mi abuela, que actualmente está una residencia. Mi madre es la que más lo vive, porque es su hija. Ella nos intenta preservar, pero nosotros, mis hermanos y yo, nos damos cuenta de todo.

Por supuesto. Lo peor es que no te reconozca. Todas aquellas historias vividas junto a ella, todo el amor que le diste y te dio, no se acuerda, de nada. Es terrible que te mire como a una desconocida, como a una asistenta y nada más. Hay que tener paciencia. No intentar algo que no se pueda. Querer mucho.

Lástima que no disfrute de su talento. Sí. Pero el corto ha hecho que más personas conozcan su enfermedad.

Y que su madre haga un cameo, y su padre celebre su éxito como si fuera la Champions. ¿Vergüencita? ¡A mí me gusta que sean así!

¿Qué tipo de cine quiere hacer? Me interesa emocionar, introducir a la gente dentro de la historia, que sienta empatía con los personajes. El director que más me gusta es J.A. Bayona.

¿Un reparto para una peli ideal? Mmm. Jennifer Lawrence, porque sabe hacer comedia y drama; y Johnny Depp, que tiene mucho carisma.

Y su generación sin parar de hacer selfis...Yo hago cosas de adolescente, ¿eh? Quedo, salgo… Pero tener cerca el alzhéimer te hace madurar un poco más rápido.