Natura 2000, la apuesta por la conservación más importante de Europa

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La red Natura 2000, reconocida hoy con la Cruz de la Orden del Dos de Mayo de la Comunidad de Madrid, supone la apuesta por la conservación de la biodiversidad más importante de Europa y forma en su conjunto el área protegida más extensa del mundo.

España es además el país con más superficie (terrestre y marina) incluida en Natura 2000, ya que suma 222.276 kilómetros cuadrados que representan el 27,3 por ciento de la superficie del país.

Esa superficie protegida en España, que se extiende por un total de 1.863 espacios catalogados como Natura 2000, prácticamente duplica la del segundo país con más territorio protegido, Francia (con 112.200 kilómetros cuadrados).

En Madrid, los espacios que están incluidos en la red representan el 39,85 por ciento del territorio de la Comunidad.

La red Natura 2000 cumple este año 25 años y se sustenta sobre las dos directivas de naturaleza más importantes de la UE: la de Hábitats -que regula la designación de Lugares de Importancia Comunitaria (LIC)- y la de Aves -que regula la designación de Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA)-.

Madrid cuenta con siete LIC (que ya han sido declarados como Zonas de Especial Conservación): las Cuencas de los ríos Jarama y Henares; la Cuenca del río Lozoya y Sierra Norte; la cuenca del río Guadalix; la cuenca del río Manzanares; la cuenca del río Guadarrama; las Vegas, cuestas y páramos del sureste de Madrid; y las cuencas de los ríos Alberche y Cofío.

La comunidad suma además siete Zonas de Especial Protección para las Aves: el Monte de El Pardo; el Soto de Viñuelas; los Encinares del río Alberche y río Cofio; el Alto Lozoya; los Carrizales y sotos de Aranjuez; las Estepas cerealistas de los ríos Jarama y Henares; y los Cortados y cantiles de los ríos Jarama y Manzanares.

Según la Comisión Europa, los espacios que están incluidos en esta red proporcionan servicios esenciales como los de almacenamiento de carbono, calidad del agua o protección frente a las inundaciones y las sequías; ésos, y otros servicios, han sido valorados por la UE entre 200.000 y 300.000 millones de euros cada año.