#LleidaClown, la broma del payaso diabólico catalán, se despide para siempre

La broma ha llegado a su fin. Hace un semana surgió de las profundidades de las redes sociales el "primer payaso diabólico catalán", o al menos eso es lo que dijeron algunos titulares. Pero este lunes, #LleidaClown ya "se despide para siempre". El tipo de la cara blanca, la peluca pelirroja y el traje y maquillaje de arlequín que quiso "darle a Lleida un toque de misterio y suspense para los amantes del género" [sic] -esto es, copiar, ahora que se acerca Halloween, la moda siniestra de los 'creepy clown'- lo deja, tira la toalla y el vestido de bufón. Tan solo hace siete días que se abrió una sospechosa cuenta en Instagram -¡solo sigue a otra cuenta!- con el lema 'Andad de día, que la noche es mía'. En ella ha colgado 11 tétricas fotos nocturnas -con encuadres e iluminación dignos de profesional de las cámaras- en las que sale él merodeando por las calles del centro de la ciudad, cerca de la catedral, al lado de la estatua de Indíbil y Mandonio, en la plaza 'dels Ous de Siurana', en la zona del campo de deportes, con un globito blanco -nada de bates de béisbol ni motosierras-, sentado en un puente, en la glorieta del parque…

Las instantáneas revolucionaron la capital del Segrià, de casi 140.000 habitantes, y la noticia, a fuerza de tuitearse, saltó a los medios. Primero a uno local y después a otros de ámbito estatal. El primer 'medio local' que dio la 'noticia' es una página en Facebook que colgó un vídeomontaje -más de 150.000 reproducciones- con las fotos del payaso terrorífico y donde se afirmaba que la ciudadanía estaba "aterrorizada". El vídeo y los atinados 'hashtags' #LleidaClown, #Lleida y #Clown fueron la mecha que prendieron rápido en la red, soliviantada justo estos días con otras noticias verídicas del otro lado del charco sobre siniestras figuras sacadas de la novela 'It', Stephen King.

JUGADA REDONDA

Así, la jugada salió redonda. En pocas horas, #LleidaClown situó a la ciudad en el mapa de Instagram y la cuenta pasó de tener unas decenas de seguidores a sumar los 11.300 actuales. Una jugada redonda. Una broma perfecta, que se ha apuntado al carro de los clowns que hace unos años salían a gastar bromas macabras en Inglaterra y que ahora han arraigado con fuerza en EEUU y varios países de Europa.

"Ha habido muchas personas que han sabido entrar en el juego, mandándonos mensajes de apoyo e intentado imitarnos, otras no lo han hecho, se han dejado llevar por las mentiras y los rumores, o, simplemente, no les ha gustado la idea, y nos han hecho llegar sus opiniones insultos y amenazas", se excusa el payaso, supuestamente quejoso de que algunos medios hayan malinterpretado sus intenciones, pues la cosa no iba de "desafiar a Lleida desde Instagram" "ni de asustar a la gente y muchas otras mentiras", dice. Asegura el clown que muchas personas les -sí, en plural (?), como si la broma fuera idea de varios- han mandado mensajes de apoyo y que, incluso, otros les han intentado imitar.

En su descargo, afirma que nadie de Lleida le ha podido ver, pues tenía preparadas las fotos desde varios días antes de abrir la cuenta. "Lo único que hicimos nosotros fue subir una foto diaria acompañada de una frase".

Y qué frases. Como para no apagar la luz de la mesita en toda la noche. "Hola". "¿Alguien por Lleida?". "Os váis a dormir demasiado pronto". Ojo. "La soledad enseña más que cualquier compañía". "Esta noche voy a robar tus sueños". "Qué nerviosa está la gente, ¿verdad?". "Mucha gente hace preguntas, pero poca gente escucha las repuestas". Puro existencialismo 'instagramer'. "Solo pido que esta noche me recuerdes". Y la última, la carta de despedida, "Hasta más ver, Lleida".

Y, ADEMÁS, UN BATMAN JUSTICIERO

A rebufo de la oscura 'celebrity' leridana ha surgido otro personaje que también ha querido seguir con la broma en Instagram. Como ya ha pasado en Inglaterra, donde hombres disfrazados de Batman salen a 'cazar' clowns perversos, desde hace tres días Lleida también tiene un murciélago justiciero. Casualmente solo le manda mensajes a su archienemigo. "Ayer el payaso cuando fui al Arnau de Vilanova ya se había ido, tranquilo @lleidaclown, disfruta del tiempo prestado", le reta en un mensaje.

Ahora, que el payaso perverso dejará de salir por las frías noches de Lleida, el Batman de la misma ciudad dice que también lo deja. Casualidades del destino, que lo único que esperaba con esa cuenta era "arrancar una sonrisa".

"SE ESTÁN RIENDO DE TODO EL MUNDO"

Unas risas. Una broma. Como algunos usuarios han escrito en estas cuentas: "Vaya dos locos psicópatas sueltos, uno que se disfraza de payaso y se cree el todo tenebroso y otro que se disfraza de Batman... Se están riendo de todo el mundo".

UN FENÓMENO 'YOUTUBER'

Sin embargo, la moda de los 'payasos asesinos' (Killer Clown) realmente alcanzó la fama con Youtube. En EEUU no se lo toman a risa, allí las siluetas tenebrosas acostumbran a asustar a la gente con armas.

La epidemia de los 'payasos siniestros' ha cobrado tal envergadura en EEUU que incluso la cadena McDonald's ha anunciado que va a restringir las apariciones de su emblemático personaje Ronald McDonaldRonald McDonald. La bola creció aún más desde el pasado agosto, y ya ha saltado a Europa. En verano la policía de Carolina del Sur comenzó a investigar informes sobre hombres vestidos de payasos que intentaban atraer a niños hacia el bosque. Las denuncias resultaron falsas, una broma, pero desde entonces a algunos les ha dado por vestirse de payaso para acercarse a coles y oficinas, a veces a pie, a veces en camionetas. Y a veces armados.

El pasado viernes, por ejemplo, un hombre denunció que un falso payaso le apuñaló en una pequeña ciudad del suroeste de Suecia, en Tvååker (suroeste). Un desconocido vestido de clown se le acercó y le apuñaló en el hombro, ha dicho la policía del condado de Halland en su página web. No es el único caso. El miércoles de la semana pasada también una joven fue amenazada de muerte por dos payasos maliciosos en el centro del país. Otros hombres disfrazados han amenazado con motosierras a los varios niños… Es una "tendencia muy triste", ha declarado el ministro del Interior, Anders Ygeman, sobre esta creciente moda de diversión. Y es que algunas bromas no tienen gracia.