INSTALACIONES DE LA NASA

Un cohete de la empresa SpaceX explota en Cabo Cañaveral

El Falcon 9, que llevaba a bordo un satélite israelí, tenía previsto despegar el día 3

Columna de humo en los aledaños de Cabo Cañaveral, donde se ha registrado la explosión de SpaceX.

Columna de humo en los aledaños de Cabo Cañaveral, donde se ha registrado la explosión de SpaceX. / periodico

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Un cohete Falcon 9 de la empresa privada SpaceX ha explotado este jueves en la zona de lanzamiento en Cabo Cañaveral (Florida, EEUU), sin que se hayan producido víctimas en el suceso. SpaceX emplea las instalaciones de la NASA para lanzar sus cohetes comerciales y con destino a la Estación Espacial Internacional (ISS).

SpaceX ha explicado escuetamente que se ha producido una "anomalía" durante unas pruebas en la rampa de lanzamiento y que ello ha tenido como resultado la pérdida del cohete y de su carga. El Falcon 9 tenía previsto despegar el próximo sábado llevando como carga un satélite de comunicaciones israelí, Amos 6, que también ha quedado destrozado.

La explosión ha causado una densa columna de humo negro apreciable desde varios kilómetros de distancia, pero no ha habido víctimas. Fuentes de Space X han indicado a medios locales que la zona estaba libre de personal de la empresa. 

SIN AMENAZA

El departamento de Emergencias del condado de Brevard, donde se encuentra Cabo Cañaveral, ha i nformado de que estas explosiones "no suponen una amenaza" para los habitantes de la zona. En la plataforma de despegue se encontraba un cohete Falcon 9, que tenía previsto poner en órbita el próximo 3 de septiembre el satélite de comunicaciones Amos 6 para la empresa israelí Spacecom.

El satélite estaba destinado a reforzar el servicio de comunicaciones del Gobierno israelí y proporcionar serviciosen una zona que va desde la costa de EEUU hasta Europa, África y Oriente Medio. 

VISIONARIO

El Falcon 9 de SpaceX, un proyecto de cohetes reusables que aterrizan verticalmente, es uno de los grandes apuestas emprendidas por Elon Musk, un emprendedor y un visionario que también destina parte de su fortuna a apuestas como Powerwall (línea de baterías eléctricas para abastecer de electricidad a hogares) o la empresa Tesla, especializada en vehículos completamente eléctricos. 

No es la primera explosión de la empresa estadounidense SpaceX, que en enero pasado vio cómo uno de sus cohetes se elevó sin incidencias, pero explotó estrepitosamente cuando intentaba aterrizar de forma controlada.