EN LLEIDA

Detenido el dueño de tres clínicas dentales por colocar cámaras en lavabos y vestuarios

El hombre, imputado por pornografía infantil, afirma que instaló los dispositivos para vigilar a los empleados

Bellpuig clinica dental pederastia

Bellpuig clinica dental pederastia / periodico

EL PERIÓDICO / BARCELONA

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Los Mossos d’Esquadra detuvieron el pasado lunes 8 de agosto al propietario de tres clínicas dentales del grupo Novadent en Lleida por haber instalado presuntamente cámaras de vídeo escondidas en los vestuarios y el baño de las consultas con el supuesto objetivo de espiar a las trabajadoras y clientes.

Fue una de las empleadas quien dio a conocer estos hechos a la policía después de que su hija menor descubriera una de las cámaras ocultas en el baño de la clínica de Bellpuig, tal y como ha publicado este jueves el diari Segre.

A partir de la denuncia, los Mossos localizaron e intervinieron el resto de grabadoras de vídeo escondidas tanto en el baño como en los vestuarios del centro y se procedió al arresto del presunto responsable de su colocación.

DELITO DE PORNOGRAFÍA INFANTIL

Tras tomarle declaración en los juzgados de Cervera, la jueza imputó al propietario de las clínicas por delitos de pornografía infantil y revelación de secretos. El hombre ya ha quedado en libertad con cargos.

La policía también realizó un registro de otras dos consultas propiedad del detenido, situadas en les Borges Blanques y el Pont de Suert y, de nuevo, fueron halladas varias cámaras ocultas dispuestas de la misma forma. Además, los agentes han intervenido los ordenadores del detenido y se investiga si las imágenes captadas podrían haber sido difundidas.

Los dispositivos de grabación fueron descubiertas por la hija de una de las trabajadoras de las clínicas Novadent, de 7 años, que acudió al baño del centro ubicado en Bellpuig y alertó a su madre del hallazgo. Según la denuncia, la pequeña fue al baña y le llamó la atención la luz de una cámara situada debajo del lavabo.

PARA CONTROLAR A LOS EMPLEADOS

Al parecer, el dispositivo estaba situado en una zona difícilmente perceptible para un adulto. Tras ser alertada, la madre de la niña desinstaló la cámara y se la llevó a su domicilio para visualizar las imágenes que había grabado. En ellas se vehía a la niña sentada sobre el retrete y, retrocediendo las imágenes, pudo apreciar cómo el acusado colocó el aparato sobre las 8.30 horas de la mañana.

En su declaración ante la jueza de guardia de Cervera, el propietario de las clínicas Novadent manifestó que había colocado las cámaras hacía unos tres meses para controlar a sus trabajadores y negó que lo hubiera hecho con una finalidad sexual. Los investigadores del caso se han centrado ahora en averiguar si las imágenes grabadas han sido difundidas por internet.