Un cura pederasta brasileño aparece ahorcado en la cárcel

La pederastia vuelve a salpicar a la Iglesia católica de Brasil. En la mañana del domingo, el padre Bonifácio Buzzi, de 57 años, apareció ahorcado en su celda del centro penitenciario de Tres Corazones en el estado de Minas Gerais. Un día antes, el sacerdote había sido arrestado cuando intentaba salir del país tras una nueva acusación de pederastia, esta vez contra dos niños de 9 y 13 años.

Buzzi no era un cura pedófilo cualquiera. Su larga historia de abusos en la ciudad de Mariana, donde agredió sexualmente a decenas de niños en la parroquia local, le valió una condena ejemplar de 20 años de prisión. Su caso despertó tal revuelo que fue uno de los religiosos mencionados en la película ’Spotlight’. Esta cinta, dirigida por Thomas McCarthy y ganadora del Oscar a la mejor película del 2015, muestra la investigación periodística del equipo del mismo nombre del diario ‘Boston Globe’ para destapar una trama de pederastia eclesial ocultada por la Archidiócesis de Boston. El de Buzzi es uno de los muchos casos de religiosos pederastas de todo el mundo citados al final del filme.    

CONDENA EN CASA

A pesar de que Buzzi pasó a ser conocido mundialmente por sus abusos a menores, el sacerdote llevaba una vida relativamente normal. Tras cumplir condena entre el 2007 y el 2015, consiguió permiso para cumplir el resto de su condena en casa. Pero Buzzi era un pederasta compulsivo. Apenas unos meses después de su libertad, los primeros rumores en la pequeña ciudad de Tres Corazones se multiplicaron. Consciente de que las familias de los menores acabarían por denunciarle había partido hacia el estado de Santa Catarina, desde donde pretendía atravesar la frontera con Argentina.

Su regreso a prisión fue demasiado para él. Buzzi utilizó las sábanas de su celda para fabricarse una 'teresa', nombre con el que se denomina en Brasil este tipo de cuerdas improvisadas y que son el tipo más común de suicidio o asesinato (a veces son los demás reclusos quienes ahorcan a violadores y pederastas) en las cárceles del país. "El detenido se encontraba solo en su celda en el momento de su muerte", quiso zanjar el informe de la Policía Civil que probablemente no tardará mucho en dar el caso por cerrado.

A pesar de que Brasil continua siendo la mayor reserva católica del mundo, con más de 133 millones de fieles, el peso del Vaticano ha comenzado un rápido declinar. La omnipresencia de las iglesias evangélicas en las comunidades más desfavorecidas del país, siendo mucho más cercanas con las necesidades de los feligreses que la Iglesia católica, unido a los escándalos sexuales han mermado la influencia de la todopoderosa Santa Sede en América Latina. Sin duda, el dramático final de Buzzi tampoco ha ayudado a mejorar la imagen de la institución