Francesc S. Carcassés: «¿Quién no sabe cantar un trozo de habanera?»

En la taberna El Trinquet de Palamós, que fundó su padrino -su tío materno-, un bar de ambiente bohemio en el que había un piano, Francesc Sánchez Carcassés (Palamós, 1957) hizo sus primeras inmersiones en el mundo de la habanera. Era a finales de los años 60. «La gente venía a tomar un trago, una copa de cava o un vaso de vino. Entraban pescadores de L'Escala y espontáneamente entre la tertulia salían canciones. El canto marinero y la canción de taberna iban definiendo un repertorio», rememora Carcassés. Durante 10 años ha presentado la Cantada d'Havaneres de Calella de Palafrugell, que este año, está de aniversario.

Presentador de la Cantada d'Havaneres de Calella de Palafrugell que este sábado celebra su 50ª edición

-¿Qué habrá de especial este sábado? Con motivo de los 50 años, hemos preparado muchísimas actividades, ya a partir de mañana, viernes, y hasta el domingo. Calella, capital de la habanera, será la capital de la música, porque habrá actuaciones de otros estilos durante el fin de semana. Vendrán artistas como Calamaro, Sanjosex... Además, Joan Roca ha creado la tapa Havanera y el célebre heladero de Palafrugell Jordi Domingo ha hecho el helado de cremat.

-¿Y la Cantada también sorprenderá? Estrenamos una habanera, El salanc de Calella, con música de Josep Bastons y letra de Carles Casanovas, componente de Port Bo.

-¿Qué grupos actuarán? Cantarán Peix Fregit, Bergantí, Port Bo y Sílvia Pérez Cruz, palafrullenca y muy vinculada a la habanera. Sus padres, Càstor Pérez y Glòria Cruz, son autores de habaneras como Vestida de nit o Temps perdut.

-Si cada año hay tantísimo público, ¿cómo albergarán a más gente este año? Además de las habituales pantallas ubicadas en las calas cercanas, este sábado habrá también pantallas gigantes que retransmitirán la Cantada en una plaza de las poblaciones de Sant Feliu de Llobregat, Puigcerdà, Lleida y Tortosa. Y, entre finales de septiembre y principios de octubre, se retransmitirá en lugares emblemáticos como el Palau de la Música de Barcelona, el Auditori de Girona, el Teatre Ateneu de Tàrrega y el Auditori Pau Casals de El Vendrell.

-Como director artístico y voz de la Cantada. ¿siente que la habanera ha traspasado el aire de mar y es ya de todos Para mí, la habanera es ya un canto popular absoluto. Lo que empezó en tabernas de Tossa, Sant Feliu, Palamós y Calella, en agosto de 1966, con motivo de la presentación del libro Calella de Palafrugell i les havaneres, tuvo su primera interpretación al aire libre y gustó tanto, que a partir de entonces se celebra la Cantada con escenario junto al mar. Pero la transmisión por televisión fue decisiva para su popularización. Ha calado ya en todo el público en general. ¿Quién no sabe cantar un trozo de habanera? Quien más, quien menos...

-En el caso de El meu avi va anar a Cuba es algo casi seguro... El meu avi y La gavina, que es traducción de la original en castellano La gaviota, abrieron las puertas a la habanera en catalán.

-Su voz radiofónica ha presentado multitud de actos, y los partidos de fútbol de la selección catalana. Si cierra los ojos imaginando ambas presentaciones, ¿qué siente que tienen en común habaneras y fútbol? Siento una misma ilusión en mi interior. Yo no hago nada que no me ilusione, y llevo esos dos espectáculos dentro. Disfruto viendo al público, junto al mar y en las gradas. Más que presentador, me siento comunicador, soy periodista vocacional y busco la conexión y el diálogo con el público.

-¿Cuál fue su primera presentación? Fue la de la coral de Palamós. Yo era el chaval del pueblo, con amigos que cantaban, y me dijeron: «Tú, sal a presentar». Y lo hice muy tranquilo. Luego vinieron conciertos de sardanas, el Festival de la Cançó marinera, crónicas deportivas en radio Costa Brava... y hasta hoy, 35 largos años.