Un urbano recogió un proyectil antidisturbios en el lugar en que fue herida Quintana

Un guardia urbano ha declarado este jueves que recogió un proyectil viscoelástico de precisión (no una pelota de goma) cerca del lugar donde cayó herida Ester Quintana, en el paseo de Gràcia con Casp, el 14 de noviembre del 2012, tras una manifestación convocada durante la jornada de huelga general. El agente ha asegurado que este objeto lo encontró entre las 9 y las 10 de la noche, es decir, pocos minutos después de que la mujer resultara lesionada en un ojo. El juicio que se celebra en la Audiencia de Barcelona continuará el próximo lunes con la declaración de los forenses que determinaron que la herida padecida en el ojo por la víctima era compatible con el impacto de una pelota de goma.

El guardia urbano ha afirmado que recogió el proyectil de la acera del paseo de Gràcia, cerca de un surtidor de gasolina, porque no lo había visto nunca y podía ser de interés para posteriores investigaciones. Un mando de la Guardia Urbana de Barcelona y un agente del cuerpo ha ratificado esta versión.

LA ADVERTENCIA

{"zeta-legacy-despiece-vertical":{"title":"Descontrol en los informes de la polic\u00eda auton\u00f3mica","text":"Lo que ha vuelto a apreciarse en la sesi\u00f3n del jueves es\u00a0el descontrol policial que se produjo el d\u00eda de la huelga general del 14 de noviembre del 2012\u00a0y los informes poco concretos que se realizaron en relaci\u00f3n con los incidentes ocurridos durante esa jornada. Dos mossos que actuaron de paisano ese d\u00eda, por ejemplo, han reconocido que en un informe oficial expusieron que en V\u00eda\u00a0Laietana los Mossos hab\u00edan lanzado pelotas de goma hacia\u00a0los alborotadores y que, despu\u00e9s, ante el juez rectificaron para decir que se\u00a0refer\u00edan solo a detonaciones y no a la munici\u00f3n empleada."}}

Durante la sesión de este jueves también ha declarado un escopetero de una dotación policial (Drago 414) que también participó en el operativo policial que se situó en la Gran Via con el paseo de Gràcia, desde donde, según la fiscalía y la acusación popular, partió el proyectil que reventó un ojo a Quintana. Este agente, que fue expedientado por la Conselleria de Interior por ocultar información, pero que nunca ha sido imputado, ha admitido que bajó de la furgoneta, pero sin el arma porque le dolía la espalda. La defensa de los dos mossos apunta a que fue este escopetero quien pudo disparar el proyectil que lesionó a la mujer y no su compaero acusado (agente de la Drago 40).

Ante esta situación y antes del interrogatorio, el presidente del tribunal, Josep Grau, ha dicho a este testigo: “Como se está sobrevalorando la posibilidad de que el disparo saliera de su escopeta, tiene todo el derecho a no responder a preguntas que le pueden incriminar". Su declaración no ha sido muy larga. Y es que de entrada ha asegurado que bajó del furgón sin la escopeta.

Eso sí, este escopetero ha reconocido que el vehículo donde iba se situó en la Gran Via con el paseo de Gràcia en paralelo con la furgoneta policial de los dos mossos que están siendo juzgados. Este es uno de los debates que se están planteando en el juicio, ya que Ester Quintana declaró la semana pasada que el disparo que le hirió provino de la primera furgoneta policial que llegó a la Gran Vía.