La protesta de los taxistas contra Uber colapsa Buenos Aires

“Los de Uber son como los manteros: no pagan impuestos”. La bronca del taxista estalló en el cruce de las avenidas Callao y Santa Fe de la ciudad de Buenos Aires, donde se realizó uno de los 25 piquetes contra la “competencia desleal”. La capital argentina se hizo intransitable este viernes. La lluvia le añadió a la escena otra dosis de malestar. El secretario general de la Federación Nacional de Conductores de Taxis, José Ibarra, no podía hacerse responsable del agua que escupía el cielo en grandes cantidades, pero le pidió disculpas a la población por los cortes. El sindicato decidió reaccionar con fuerza frente a los dueños de la aplicación de origen estadounidense que contacta a chóferes particulares con usuarios. "Uber nos obliga a hacer esto", dijo. Esa empresa, añadió, provoca en Argentina “discordia, caos y malestar” como en otros países.

Los taxistas han contado con el respaldo del propio presidente Mauricio Macri, quien ponderó la posición del Gobierno de la ciudad de Buenos Aires de ponerle frenos a Uber. Macri recordó a su vez que “nuestros taxistas son un símbolo de la Argentina”.

Las autoridades capitalinas comenzaron a acarrear autos que prestan servicio para Uber, pocas horas de su accidentado debut. A su vez resolvió aplicar multas de unos 5.000 euros a esos conductores, que fueron abonadas por la firma norteamericana. La Secretaría de Transporte clausuró a su vez un local donde se dictaban cursos a los dueños de los autos que se sumaron a Uber. El Código de Transporte solo contempla contratar viajes en auto espontáneamente en la calle o bien mediante llamadas a una empresa de radiotaxi. Objeta además que la compañía no está registrada como contribuyente.