Las tres denuncias por abusos contra el subdirector marista no llegarán a juicio

Pintada en la entrada del colegio maristes de les corts denunciado por pederastia

Pintada en la entrada del colegio maristes de les corts denunciado por pederastia / periodico

GUILLEM SÀNCHEZ / BARCELONA

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La magistrada Ángeles Fernández Tió, titular del juzgado de instrucción número 8 de Barcelona, ha ordenado el archivo de las tres denuncias por abusos sexuales que tres exalumnos han presentado contra F. M., subdirector de los Maristas de Sants-Les Corts, porque hacen referencia a delitos ya prescritos. Es decir, tal como indicó el Ministerio Fiscal sobre este asunto, el Código Penal no permite el enjuiciamiento de sospechosos de cometer abusos sexuales que no han sido denunciados dentro del plazo de tiempo estipulado legalmente.

Estas tres denuncias, todas referentes a abusos o tocamientos producidos a mediados de los años ochenta y comienzos de los noventa, han sido presentadas a los Mossos d'Esquadra cuando los tres exalumnos habían superado el límite de tiempo que permite la legislación actual. Tal como subrayó la fiscalía, esta causa debe archivarse porque han transcurrido "más de 10 años desde que los denunciantes cumplieron la mayoría de edad". 

Actualmente, una víctima de tocamientos puede denunciarlos hasta cinco años después de cumplir la mayoría de edad. Si ha sufrido una agresión sexual (con penetración vaginal, anal o bucal) puede presentar una demanda contra su agresor hasta 15 años después de cumplir los 18 años.

LOS MARISTAS NO EJERCEN LA ACUSACIÓN PARTICULAR

La causa abierta contra el hermano marista F. M., subdirector del centro de Sants-Les Corts, apartado desde el 11 de febrero por decisión de la dirección de este colegio, se ha archivado sin que nadie se hayan personado como acusación particular.

La cúpula de los Maristas aseguró el 11 de febrero en una entrevista en Catalunya Ràdio, concedida justo después de apartar a F. M. de su cargo, que la institución se personaría como acusación particular “en todos los casos”. Sin embargo, la orden religiosa no lo ha hecho en esta causa. Hace un mes y medio que la institución religiosa sabe que F. M. estaba siendo investigado por los Mossos d'Esquadra. De hecho, fue la propia policía quien les informó de estas pesquisas y precisamente este aviso motivó que acordaran su suspensión cautelar. 

La decisión de no personarse como acusación particular contra uno de sus docentes con rango de directivo acusado de abusos sexuales por tres exalumnos ahora imposibilita, por ejemplo, que la institución pueda recurrir el auto de archivo de la magistrada.