BCN y París crean una alianza de ciudades para acoger refugiados

Las ciudades de Barcelona, París, Lesbos y Lampedusa pidieron ayer por carta a los dirigentes europeos que «no den la espalda a los refugiados» y que no pierdan más tiempo para reubicarlos en las ciudades que han manifestado su voluntad de abrirles sus puertas de par en par para acogerles. La alcaldesa, Ada Colau, y su homóloga francesa, Anne Hidalgo, son las dos primeras firmas que se pueden ver en un manifiesto publicado ayer en el diario El País, y que también está suscrito por los primeros ediles de Lesbos (Grecia), Lampedusa (Italia), Madrid, A Coruña, Cádiz, Santiago de Compostela y Zaragoza.

Los dirigentes municipales han querido espolear así a los ministros de Justicia e Interior que hoy se reunirán en Bruselas para dar su respaldo al reparto de 120.000 refugiados llegados a Hungría, Grecia e Italia que la Comisión Europea hizo el pasado miércoles. El Gobierno español ya informó de que está dispuesto a acoger los 14.931 que le corresponden del total, más los 2.749 que se comprometió a recibir en julio.

En la carta, los firmantes insisten en que no se trata de hacer «un gesto de caridad», sino de «garantizar un derecho humano, el del asilo». En su opinión, las ciudades europeas están preparadas para convertirse en lugares de acogida y dar la bienvenida a los refugiados y recuerdan que aunque son los estados los que otorgan el estatuto de asilo son las ciudades «las que brindan cobijo». «Nuestros servicios municipales están ya trabajando en planes de acogida para asegurar pan, techo y dignidad a todos aquellos que huyen de la guerra y del hambre. Solo falta la ayuda de los estados», aseguran. Y acaban la carta con esta frase: «No les dejen solos, no nos dejen solas»

El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, amenazó el viernes con convocar una cumbre de jefes de Estado y de gobierno sobre esta crisis si hoy los ministros no envían una «señal concreta de solidaridad y unidad».

EN OCTUBRE / Según fuentes comunitarias, está previsto que los primeros refugiados empiecen a ser distribuidos por países el mes que viene. El Gobierno español confía en poder hacer un buen análisis de los «perfiles» de los afectados para poder llevarlos a las comunidades autónomas en las que se vayan a sentir más cómodos, especialmente por razones laborales, para que puedan integrarse mejor. Habitualmente, el Ejecutivo hace ese examen pormenorizado cuando se le da el asilo a un demandante y fuentes de la vicepresidencia insisten en que ahora, pese al elevado número de afectados, también se podrá hacer ya que llegarán de manera escalonada.