El menor de la ballesta, entre el "chico amable" y el "friki' de las armas"

El menor de 13 años, que ha acabado con la vida de un profesor del Instituto Joan Fuster del barrio de Navas, era un "chico muy amable con los profesores" y "un alumno muy responsable que nunca faltaba a las clases", según explica a EL PERIÓDICO un profesor que quiere presevar su anonimato.

"No era conflictivo y tampoco tenía problemas mentales", resume en un primer trazo el retrato del estudiante, en contra de lo apuntado incialmente en algunos medios. Además proviene de una "família fabulosa".

Sin embargo, durante la mañana ha ido surgiendo voces de estudiantes del Joan Fuster que aseguran que el muchacho "estaba un poco ido" y que "hacia cosas raras". Algún compañero se atrevió a describirlo como "el típico 'friki' de las armas".

UN INSTITUTO TRANQUILO

El profesor que ha hablado con este diario ha querido resaltar que el Joan Fuster se encuentra en un "barrio sin conflictividad" y que lo sucedido este lunes no tiene nada que ver con los "valores" que intentan "día a día inculcar a los alumnos". El profesor, que casi lleva 20 años impartiendo en el centro, ha querido resaltar que los valores de este insituto han sido siempre "compañerismo, solidaridad y educación" y que siempre "los tutores hemos hecho una piña a la hora de detectar problemas entre los niños y solucionarlos", añadiéndo que "siempre hemos estado encima cuando ha sido necesario". 

Preguntado por otros hechos de violencia en el centro, el profesor ha asegurado que "es la primera vez que sucede algo así en este Instituto y que no hay antecedentes de situaciones similares" por lo que el conjunto de docentes y alumnos "estan profundamente consternados". Según ha podido informar a EL PERIÓDICO, los niños están siendo atendidos por un grupo de "psicólogos" y que a partir de este martes van a "estar dando mucho apoyo y cariño a todos los alumnos".