Veinte españoles tienen tanto como los 14 millones más pobres

EL PERIÓDICO
BARCELONA

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Los datos que aporta el estudio de Oxfam Intermón son igualmente lacerantes cuando se refieren a España y evidencian que también en este  caso se cumple la tendencia hacia una mayor desigualdad en el reparto de la riqueza. Aunque ninguna de las principales fortunas españolas alcance el patrimonio que reúne Bill Gates, no por ello se quedan cortas.  Así, los 20 españoles más acaudalados sumaban el pasado marzo una fortuna de 115.400 millones de dólares (unos 90.500 millones de euros), lo que equivale a la riqueza que poseía el 30% más pobre de la población española (casi 14 millones de personas).

Esas mismas 20 personas, según datos de Forbes, incrementaron su riqueza en el último año en 12.200 millones de euros. El estudio de Oxfam le pone dimensión a este crecimiento: supone cada minuto 29.395 dólares (unos 23.000 euros), que es más o menos el valor del salario medio anual en España.

Hay otros ejemplos especialmente hirientes en el actual contexto de crisis económica. En la escala más alta, el 1% de los más ricos de España tienen tanto como el 70% de los ciudadanos con menores ingresos (32,5 millones de personas) y tan solo tres individuos acumulan una riqueza que duplica con creces la del 20% más pobre de la población (nueve millones de personas). Además, la riqueza que acumula el 10% más acaudalado de los españoles es superior al del resto de la población (cerca de 42 millones de individuos).

Todo ello convierte a España en el segundo país más desigual de la Unión Europea, según Oxfam Intermón, cuyo director general, José María Vera, afirma que esta situación no es fruto del azar y debe revertirse. «Pero para ello -apunta- no basta con esperar a que la economía repunte», porque el crecimiento económico por sí solo «no crea sociedades más justas ni prósperas». Por ello, continúa Vera, «son necesarias políticas más redistributivas que apuesten por reducir la desigualdad: recaudar de forma justa y progresiva, asegurando que los que más tienen contribuyen como les corresponde al bien común, e invertir en políticas públicas que garantizan la igualdad de oportunidades, junto con un acortamiento de las escalas salariales y la disminución de las brechas entre hombres y mujeres».

Pero, de momento, todas estas premisas están lejos de cumplirse, según el director general de la oenegé. «El Gobierno español va en dirección contraria al promover una reforma fiscal que no servirá para recaudar de una manera más justa y al presentar unos Presupuestos que no apuestan por un incremento del gasto social», afirma Vera.

PULSO EN EL CONGRESO / Precisamente, el aumento de la desigualdad enfrentó ayer al presidente del Gobierno y al secretario general del PSOE en la sesión de control del Congreso. Esgrimiendo los últimos datos hechos públicos por las oenegés, Pedro Sánchez acusó a Mariano Rajoy de haber abandonado la lucha contra la pobreza y le instó a dejar de hablar de la herencia recibida, porque la que él dejará «será la de la desigualdad». «Solo gobierna para el 10% de la población, que nada tiene que ver con el desempleo ni tampoco con la pobreza que sufren muchos niños y niñas», denunció el líder socialista, informa Manuel Vilaseró.

Rajoy, al igual que había hecho anteayer en el Senado, se aferró a las últimas estadísticas para atribuir el aumento de la pobreza y la desigualdad a la legislatura socialista y reivindicar que ahora «los indicadores están cambiando» y la situación «va a mejor», aunque reconoció, eso sí, que aún queda mucho por hacer. Para eludir la crítica a la falta de políticas de apoyo a las personas más desfavorecidas, echó mano de su mantra habitual: que las mejores medidas son poner fin al desempleo y recuperar la economía.