Gente corriente

Maria Rascón: «Me siento más llena de mi hijo que nunca»

Mamá de Arnau y Roger. Sus Ninekas, muñecas solidarias con los niños enfermos de cáncer, están hechas de puro amor.

«Me siento más llena de mi hijo que nunca»_MEDIA_1

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GEMMA TRAMULLAS

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Durante 40 minutos su relato fluye ininterrumpidamente, como las lágrimas que nos resbalan por las mejillas. Entonces Maria hace una pausa: «¿Tiene alguna pregunta?», dice. Yo solo acierto a pedirle un pitillo, y eso que hace años que no fumo. De ahí que, excepcionalmente, esta sea una entrevista de una sola pregunta.

-¿Qué late en el interior de una Nineka?

-Yo era la hermana mayor de una familia humilde de Cornellà. Antes de ir al instituto ayudaba a mi madre a limpiar oficinas y siempre soñaba con el día en que yo me sentaría en una mesa como aquellas. Tuve dos hijos, Arnau y Roger, y llegué a jefa de calidad en una empresa. Tenía una vida cómoda.

Pero tenía una carencia: la creatividad. Siempre he sido creativa y en verano me llevaba un kit con hilos y alambre para hacer manualidades. Una vez me salió una muñeca y mis hijos la llamaron Nineka. Solo después de todo lo que pasó me di cuenta de que era el acrónimo de NI un NEn amb KÀncer.

El 10 de julio del 2011 a Arnau le diagnosticaron el linfoma linfoblástico. Me dediqué a él en cuerpo y alma y, como eran muchas horas de hospital, decidí hacer Ninekas para venderlas y donar el dinero al laboratorio de Sant Joan de Déu. En el hospital no había nadie más optimista que Arnau y yo. Hacíamos reír a los demás, apostábamos sobre su nivel de glóbulos blancos... todo era un juego. Pero su salud se deterioró. Pasó seis meses en la uci. ¿Por qué tanto sufrimiento?

El último mes dejó de reír. Una noche estaba arropándole cuando, de pronto, dijo: «Mamá, ¿estás orgullosa del esfuerzo que hago?». «¡Soy la madre más orgullosa y feliz del mundo! -respondí--. Pero siento no poder estar yo en esta cama. Daría la vida por ti». Entonces él sonrió: «Acércate -murmuró-. Yo también daría la vida por ti».

Cuando un hijo te dice esto es que es todo amor. Entendí su mensaje. Se estaba despidiendo y me preparé para el final. Estaba destrozada pero tenía que tener la cabeza serena para transmitirle  todo el amor del mundo y hacerle saber que me había dado el título más grande que hay en esta vida: el de ser su madre y la madre de Roger. Así que saqué todo el amor que sentía y lo transformé en darle las gracias.

Arnau se fue el 15 de julio del 2012. Tenía 14 años. Nunca digo que murió, no porque no lo acepte sino porque me siento más llena de él que nunca. Es como si me hubieran dicho: «Durante 14 años tendrás un ángel pero deberás dejarlo ir porque ha venido a enseñarte unas cosas y tienes que aceptar su destino». Decidí echarle un pulso a la vida. No me iba a hundir. Nadie puede quitarme a mis hijos, ni siquiera la vida.

Resurgí, me calcé y aquí estoy, con más fuerza que nunca. Volví a coger la caja de los hilos de las muñecas y sant tornem-hi, entre todos podíamos seguir haciendo Ninekas para ayudar a mantener el laboratorio de Sant Joan de Déu y que algún día nadie tenga que pasar por lo que yo he pasado. Bauticé el proyecto -que cuenta con el apoyo del Ayuntamiento de Cornellà- como como Mil y una Ninekas porque son más de mil los niños enfermos de cáncer y  más de mil las noches que los padres pasamos junto a la cabecera de su cama.

Cuando pinto las Ninekas pongo todo mi amor; estoy en otro lugar, conmigo, totalmente en paz. Arnau me enseñó que, al final, eres lo que das: él me dio todo su amor y yo a él, por eso tengo una paz increíble. La competitividad, la envidia, el estatus que anhelaba de joven... eso ya no importa. Me he vuelto más simple, más de corazón. En cada Nineka late un trocito de corazón de Arnau, mío, de mi familia y de las 70 ninekaires que colaboran. Ojalá pudiera hacerlas también para los desahuciados, para los que sufren la crisis energética...

Con motivo del Festival Internacional de Pallassos, las Ninekas se visten de clown para una exposición en la Biblioteca Central de Cornellà (abierta de lunes a sábado hasta el día 25; venta solo el día 21, de 18.30 a 20.00 h.). Es un adelanto de la gran muestra 'Mil y una Ninekas' que abrirá en febrero de 2015 [www.nineka.cat