Interior exhibe vídeos y audios que no aclaran la tragedia de Ceuta

El Gobierno acordó con el PSOE la semana pasada rebajar la presión sobre el Ministerio del Interior a cambio de que el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, aportara ayer en una nueva comparecencia en el Congreso nuevos datos y material audiovisual sobre la tragedia que el pasado 6 de febrero costó la vida a 15 personas que intentaban llegar a nado a la playa del Tarajal, en Ceuta. Las dos horas de comparecencia y los ocho vídeos exhibidos, junto a varias grabaciones de las comunicaciones de los mandos de la Guardia Civil, no aclararon la parte más polémica de una actuación que investiga una jueza de Ceuta: quién ordenó, por qué y para qué disparar 145 pelotas de goma al mar que, según Martínez, no produjeron ninguna situación de pánico en el agua.

En su intervención, Martínez defendió con vehemencia una actuación de la Guardia Civil que calificó como «ajustada a la ley». Y contradijo así a su ministro, Jorge Fernández Díaz, quien ya había asumido el error de disparar pelotas de goma contra unos hombres que intentaban llegar a nado a la playa. A pesar de defender el procedimiento, el secretario reconoció que existe desde entonces una prohibición de volver a utilizar material antidisturbios para disuadir a inmigrantes en el mar.

Interior exhibió ocho vídeos en los que se aprecia con claridad el momento en el que un grupo de sub-saharianos lanza piedras contra los guardias civiles tras la aparición de los primeros cadáveres. En las imágenes también se aprecia cómo una embarcación rescata a otro grupo de hombres que intentan llegar a nado y van más rezagados. Pero, inexplicablemente, no aparece ni una sola imagen de guardias civiles disparando algunas de las 145 pelotas de goma que se utilizaron esa mañana. Ni se escucha en ningún momento a ningún mando dando la orden de disparar, de dejar de hacerlo, o de expulsar en la frontera a los 15 subsaharianos que lograron alcanzar la costa española a nado.

AHOGADOS EN MARRUECOS / En cuanto a la polémica sobre si la Guardia Civil denegó el auxilio a los subsaharianos, Martínez aseguró que los agentes no fueron conscientes «en ningún momento» de que había gente que se ahogaba. El secretario de Seguridad insistió en que la tragedia sucedió en aguas marroquís, al otro lado del espigón. «Nadie se ahogó delante de un guardia civil, ni ninguno de los fallecidos resultó herido por el impacto de material antidisturbios». También negó que los disparos al agua provocaran alguna situaciones de pánico entre los inmigrantes. Para Martínez, en la tragedia coincidieron varios factores fatales. Primero, que la marea estaba mucho más alta de lo que esperaban los subsaharianos, con una profundidad superior a los dos metros, que casi ninguno sabía nadar, y que estaban excitados y agotados.

Los portavoces de la oposición se mostraron «decepcionados» con las explicaciones.