Apuesta por los ciclos formativos y los idiomas

La formación profesional, el tan en boga fomento del espíritu emprendedor y de las vocaciones científicas y los idiomas, sobre todo los idiomas (y entre ellos el inesperado auge que en poco tiempo ha tomado el portugués). El Saló de l'Ensenyament, que hoy abre sus puertas en el recinto de la Fira de Barcelona, apuesta este año, en su 25ª edición, por las disciplinas que más reforzadas -y mejor paradas- quedan en la ley orgánica para la mejora de la calidad educativa, la polémica LOMCE del ministro José Ignacio Wert. Un año más, el certamen tiene garantizado un desfile, hasta el próximo domingo, de miles de estudiantes de ESO, bachillerato y FP en busca todos ellos de una orientación para encarar su futuro y los agentes y empresas del sector educativo (hay 190 expositores) no quieren perder su oportunidad.

En un momento de crisis como este y con una universidad más cara que nunca, la formación profesional se consolida como «una de las mejores opciones educativas para acceder al mercado laboral o para compaginar los estudios con el trabajo», aseguran los organizadores del salón. Allí se presentarán, agregan, «cerca de 150 cursos de FP de todas las familias profesionales y de la FP dual».

OPCIONES LABORALES / No en vano un estudio reciente sobre la inserción laboral de las enseñanzas profesionales, presentado el pasado enero por la Conselleria d'Ensenyament de la Generalitat de Catalunya y el Consell General de Cambres de Catalunya, revelaba que los graduados de ciclos formativos están menos expuestos al paro que la media de jóvenes de entre 16 y 24 años que no tienen estudios. Del 41,08% de los graduados que ya se han incorporado al mercado laboral, el 28,3% tienen un empleo y el 12,78% compagina estudios y trabajo.

También está registrando un buen momento el aprendizaje de idiomas, según la Asociación Española de Promotores de Cursos en el Extranjero (ASEPROCE), así mismo presente en la feria, a través de un salón específico de idiomas. La entidad ha constatado que «la demanda de cursos para estudiar en Alemania ya concentra un 10% de las peticiones» de estudiantes interesados en salir fuera, aunque por detrás aún del inglés y el francés. «También ha crecido el interés por el portugués por ser una lengua hablada por 250 millones de personas y también por la creciente demanda del perfil de ingenieros de construcción por parte de Brasil», añade la entidad.

Para el tradicional aprendizaje del inglés, aparecen lo que los expertos llaman nuevos formatos. Por ejemplo: inscribir a los niños en campamentos de países de habla no inglesa (Francia y Alemania principalmente) para que aprendan inglés junto a niños franceses y alemanes.

La ciencia, la tecnología y el espíritu emprendedor -que con la LOMCE se convierte en asignatura de la ESO- tendrán también sus propios espacios dentro del popular salón educativo.