ENCUENTROS DE ECONOMÍA

Óscar Martín (Ecoembes): «En Catalunya se recicla más que en España y en la UE»

La campaña de sensibilización 'Envàs, on vas?' ha contribuido a mejorar la tasa de recuperación de envases a través de los contenedores azules y amarillos. Ecoembes, la empresa que se encarga de la gestión, asegura que Catalunya ha alcanzado niveles de recogida cercanos al máximo.

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

ENRIC HERNÀNDEZ: ¿Qué balance hacen de la campaña Envàs, on vas?

 

ÓSCAR MARTÍNMuy positivo. Tan solo dos meses después de la campaña, en las plantas ya pudimos ver que lo que nos llegaba en el contenedor amarillo había mejorado porcentualmente de una manera sobresaliente. Por tanto, si se ha conseguido que el ciudadano la interiorice y ha podido entender de una forma sencilla lo que tiene que llevar estamos contribuyendo al objetivo final de todo esto que es que el medioambiente tenga beneficios.

E. H.: Por cada punto de mejora en la recogida de residuos, en este caso de envases, ¿qué impacto hay sobre la cuenta de resultados?

 

O.M.Cada vez que incrementamos la aportación en un kilo de media, estamos costeando a los municipios 20 millones de euros. En España, desde que empezamos hace 16 años la recogida selectiva, los ingresos para estas entidades han sido de 3.800 millones. En Catalunya, las empresas que ponen en el mercado los envases han trasferido 900 millones de euros.

 

E. H.: Para que el lector lo entienda, ¿qué es Ecoembes?

 

O. M.Es una compañía sin ánimo de lucro a la cual todas las empresas que ponen en el mercado sus productos tienen que hacer una aportación para poner en marcha las infraestructuras de reciclado. A través de ese compromiso hemos conseguido que España esté en una tasa de envases domésticos del 70,3%. Catalunya está en una tasa del 82,7%.

MAX JIMÉNEZ BOTÍAS : ¿Cómo se reparte el impacto económico en todos los agentes que intervienen en la gestión de los residuos?

 

O. M.Los ingresos de Ecoembes tienen que ir destinados al 100% -a excepción de una pequeña porción del 4% que son gastos de estructura- a sufragar las infraestructuras, la sensibilización, etcétera. El 96% restante de los ingresos tiene que ir destinado a las comunidades locales y a las comunidades autónomas .

 

M. J. B. : Básicamente para gestionar el sistema.

 

O. M.Hay costes de infraestructura, como equipos públicos: contenedores. Tenemos una red de 530.000 contenedores por España, la cual es una de las más altas de Europa. Vehículos de recogida, hay más de 1.000 camiones que están recogiendo a diario los contenedores azules y amarillos. Y eso se traduce en un gran número de personas que trabajan. Hay que destacar la creación de 42.000 puestos de trabajo entre directos e indirectos por la actividad del sistema integrado.

SALVADOR SABRIÀ: ¿Se encargan también del control de las empresas para que cumplan?

 

O.M.: Cuando se detecta un fraude de una empresa que no declara todo lo que pone en el mercado es la comunidad autónoma quien tiene la potestad sancionadora. Pero el grueso de las inspecciones de fraude las lleva a cabo Ecoembes. A través de las declaraciones anuales de los envasadores, de los que ponen el producto en el mercado.

ANTONIO MADRIDEJOS: ¿Pagan las empresas a Ecoembes en función del número de envases que ponen en el mercado?

 

O.M.Tenemos una tarifa de punto verde diferenciada por material: tantas toneladas de un material por el valor correspondiente y se hace una declaración anual. Están obligadas por ley. Hay una directiva de marca de envases y, a continuación, una ley de envases, que es la que regula todo este campo.

S.S.: ¿Hay una coordinación europea?

 

O. M.La propia directiva nos marca a todos los estados miembros unos objetivos de reciclado que debemos cumplir. Además, de todo aquel producto de Francia, Portugal o de Polonia, por citar ejemplos, que se comercializará en el mercado español tiene que hacerse una declaración de lo que se vende aquí.

A. M.: ¿Tienen ustedes estimaciones de qué porcentaje de empresas no declaran que venden productos envasados o de qué tipos son?

 

O. M.: Estimamos que aproximadamente el 85% o el 90% de lo que se pone en el mercado está adherido al sistema de gestión. Sobre el otro 10%, tenemos identificado que corresponde a un menudeo muy importante. A pequeñas empresitas que ponen en el mercado producciones reducidas. Las grandes empresas y las medianas están en el sistema.

M.J.B.: ¿Hay que hacer algo con esas empresas que quedan fuera?

 

O. M.Para nosotros es fundamental perseguir ese fraude por una cuestión de equidad y de solidaridad. Los costes de poner en marcha el sistema -450 millones de euros—, si los lleváramos a una base 100, se debería cubrir con los ingresos del sistema. Si a partir de esos ingresos alguien no cumple, pues evidentemente los otros tienen que pagar por él. Para nosotros es muy importante la equidad.

 

 S.S.: ¿Hay problemas de dispersión de normativa autonómica?

 

O.M.:El propietario final de los residuos es el ayuntamiento. Bien es cierto que todo esto se integra en una cadena. La potestad municipal y los reglamentos que pueda establecer una entidad local para poner en marcha los sistemas de recogida selectiva deben estar de acuerdo con una normativa autonómica y una normativa  estatal.

S. S.: ¿Se encuentran con comunidades que exijan más que otras?

 

O. M.: Que se exija más en los objetivos, sí. Pero al final, nosotros tenemos unos objetivos como país que son los que nos marca Europa. Otra cosa es que hay comunidades autónomas

-tenemos el caso de Catalunya- que de alguna manera tienen una inquietud mayor, y que lejos de estar en esa media se sitúan en Europa como un país líder, entre los cinco primeros países, con una tasa del 82,7%.

S.S.¿Cómo se explica esta diferencia?

 

O. M.El papel del ciudadano es fundamental. Está visto que el ciudadano catalán tiene una clara mentalidad de contribuir al medioambiente, pues ha interiorizado antes este mensaje y ha decidido llevar sus envases a los contenedores azules y amarillos en mayor medida que otros ciudadanos. Catalunya en materia general de medioambiente y de residuos va muy por delante a otras comunidades autónomas y que la UE.

JOSEP-MARIA URETA: ¿Teme que la ley de unidad de mercado pueda ser un coladero para que retrocedamos en materia de medioambiente?

 

 O.M.Comparto esta preocupación. Estamos trabajando con la Federación de Municipios y Provincias y con las comunidades autónomas para transmitir que no podemos perder lo ganado. Hay algunos aspectos de esta ley de unidad de mercado, como el tema del tratamiento en origen, que están en contra del libre mercado. 

 

E.H.: ¿Ha afectado la caída del consumo por la crisis en el volumen de residuos recogidos?

 

O. M.Se ha notado, sin duda. Las toneladas que llegan a Ecoembes están en cifras del 2007 o el 2008. La crisis afecta, pero a pesar de que se pone en el mercado menos producto, los ciudadanos han interiorizado el mensaje de la importancia de reciclar y lejos de haber estabilizado la tasa de reciclado ha aumentado.

 

S.S.: ¿En qué medida un reciclaje más eficiente puede reducir empleo?

 

O.M.No es así. El reciclaje crea empleo. La actividad del sistema de gestión genera 42.500 empleos entre directos e indirectos. De estos, casi 10.000 puestos son directos. En Catalunya casi 1.800 puestos de trabajo están dedicados a la recogida selectiva del contenedor azul y amarillo. Cada vez que crece la tasa de reciclado crece la tasa de empleo.

 

A. M.: ¿Qué perspectiva tenemos de cumplimiento de las directivas?

 

O. M.Bruselas quiere una tasa de reciclado que debería estar en el 50% en el 2020. España ya estaría cumpliendo hoy ese 50% porque está en el 70,3%. Y Catalunya, en el 82,7%.

 

S.S.: ¿Qué le parece el sistema de depósito y devolución de envases?

 

O. M.: La propuesta que hay para España es un sistema marginal y que solo quiere responsabilizarse de un 9% de los envases. Tenemos que dar la solución al 100%. Si además, para hacernos cargo solo de un 9% de los envases, el coste es de 900 millones de euros, se puede imaginar que nuestra posición al respecto es contraria. En España ese sistema no puede funcionar.