Los camioneros juegan sus últimas cartas para que no les echen de la N-2

Los camioneros de Girona, agrupados bajo la asociación Asetrans, batallarán hasta el último momento para evitar que se les expulse de la N-2 y se les obligue a circular por la AP-7 -en los 81 kilómetros que hay entre Vidreres (Selva) y la salida sur de La Jonquera (Alt Empordà)- a partir del 19 de abril para frenar la siniestralidad. Hoy presentarán las alegaciones a la resolución del Servei Català de Trànsit. En ellas consideran que se trata de una medida «desproporcionada» y «carente de fundamento», según el secretario general de Asetrans, Carlos Palacio, además de que, creen, compete al Ministerio de Fomento y no a la Generalitat.

Mañana finaliza el plazo de 10 días naturales de la resolución de Trànsit para que las 55 asociaciones de transportistas nacionales e internacionales; las administraciones (catalanas, españolas y francesas); las concesionarias y los ayuntamientos y consejos comarcales a quienes se informó del cambio, den su opinión. Hasta ayer solo habían dado su parecer dos de ellas pero hoy se sumará Asetrans. Luego, Trànsit tendrá cuatro días para responderles.

Y mientras los transportistas de Girona se quejan del «agravio comparativo» que supone para los profesionales que actualmente usan la N-2 de forma habitual, la Generalitat planea un despliegue policial masivo para organizar los cambios que se aplicarán, si no hay sobresaltos en el último momento, el próximo 19. Ayer hubo una nueva reunión en la Conselleria de Territori i Sostenibilitat entre responsables de este departamento, de Trànsit, Mossos d'Esquadra y Abertis, entre otros.

CALENDARIO FIRME / En el encuentro se trató cómo informar a los comercios afectados y cómo se señalizará tanto la N-2 como la AP-7. El dispositivo policial fue otro de los asuntos que estuvo sobre la mesa, no solo para el día que comience el veto (se reafirmó el calendario) para los camiones de cuatro ejes o más, sino también para las semanas inmediatamente posteriores, hasta que los conductores se habitúen a la prohibición.

El veto de los tráileres viene compensado por una reducción en la tarifa del peaje que de momento está fijada en un 25% para los vehículos que hagan todo el recorrido (y por lo tanto, de tráfico internacional) y en un 50% para los que hagan trayectos locales, si bien los gerundenses reclaman que se amplíe en su caso.