casi 11 meses después de la desaparición

Un informe afirma que los restos hallados en la finca de Bretón son humanos y pueden ser de sus hijos

José Bretón, reconstruye, con la policía, la desaparición de los niños en el parque Cruz Conde, en Córdoba, el pasado octubre.

José Bretón, reconstruye, con la policía, la desaparición de los niños en el parque Cruz Conde, en Córdoba, el pasado octubre. / ea

JULIA CAMACHO / MAYKA NAVARRO/ Córdoba

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La familia deRuth Ortiz, madre de los menoresRuth y José desaparecidos el pasado 8 de octubre en Córdoba, ha recibido la confirmación de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Policía de que losrestos óseos hallados en una hoguera semiapagada en la finca de las Quemadillas de Córdoba se corresponden con los dos de los niños desaparecidos.

Según ha avanzado en un boletín especial Canal Sur, un informe externo encargado por la familia de lamadre de los niños, y ordenado por el juez, determina que se trata derestos humanos y no de roedores, como se apuntó tras localizarlos en unas cenizas en lafinca propiedad de la familia de Bretón, padre de los menores, en los primeros días de investigación tras la desaparición. Los restos, según el informe, corresponden a niños de 2 y 6 años, las mismas edades que tenían José y Ruth.

Esta mañana, según informaJulia Camacho, la tapia de la finca de Las Quemadillas ha amanecido llena de grafitos: "papito asesino", "rata", "alimaña"...

Posible error

Todo hace indicar que pudo haber un error a la hora de analizar aquellos restos óseos encontrados inicialmente en la hoguera, que pudo alcanzar temperaturas superiores a los 800 grados destruyendo gran parte del material orgánico existente.

La clave, el ADN

Ahora lo más importantes es confirmar a quién pertenecen esos restos óseos encontrados en la hoguera y que el forense vasco que ha elaborado el informe ha confirmado que son humanos. Y la clave está en el ADN. Pero no será fácil. Ninguna de las piezas recuperadas es mayor de cinco centímetros. Y con las técnicas que actualmente tiene la policía científica, la extracción del ADN implicaría la destrucción del hueso, lo que impediría después que alguna de las partes pudiera solicitar un contrainforme. Sin embargo, la policía no tira la toalla. Y en las últimas horas, los responsables de la policía científica están en contacto con un médico de reconocido prestigio que tendría una técnica para conseguir el ADN manteniendo el hueso intacto para otras pruebas.

El informe de Pablo Etxebarria Gabilondo viene a confirmar lo que desde un primer momento sospecharon los responsables de la UDEV, que no tardaron en tener el convencimiento de que los pequeños Ruth y José habían sido asesinados por su padre.

Y esa fue la única línea de trabajo que en los últimos meses tiró de la complicada investigación policial: buscar el cadáver de los niños.