NUEVA CONTROVERSIA DE LA IGLESIA ESTADOUNIDENSE

El Vaticano, contra las monjas de EEUU

Acusa al principal grupo de superioras de promover ideas «feministas radicales»

IDOYA NOAIN
NUEVA YORK

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La última batalla del Vaticano en EEUU tiene un enemigo sorprendente: las propias monjas de la Iglesia católica en el país. El miércoles, la Congregación para la Doctrina de la Fe de la Santa Sede anunció que reformará la Conferencia de Líderes de Mujeres Religiosas (LCRW por sus siglas en inglés), una organización de 1.500 madres y hermanas superioras que representan a congregaciones que reúnen al 80% de las 57.000 religiosas de EEUU. El Vaticano alega que ha detectado en el grupo «serios errores teológicos e incluso doctrinales», le acusa de cuestionar la doctrina vaticana en temas como la ordenaciones de mujeres y homosexuales y de mantener «silencio sobre el derecho a la vida desde la concepción hasta la muerte natural» y denuncia «la prevalencia de determinados temas feministas radicales

incompatibles con la fe católica».

El documento, de ocho páginas, también incluye una reprimenda al grupo de monjas, fundado en 1956, por hacer declaraciones públicas «que retan o chocan con los obispos, que son los auténticos profesores de la fe y la moral». Uno de ellos, el arzobispo de Seattle, Peter Sartain, ha sido nombrado para dirigir la reforma de la asociación de monjas. Con ayuda de otros dos obispos, Sartain será el encargado durante los próximos cinco años de reformar los estatutos del grupo y supervisar sus planes y programas, incluyendo la aprobación de oradores y conferenciantes invitados a sus reuniones.

Se intentará así, por ejemplo, suspender los vínculos de la agrupación de monjas con grupos como NETWORK, un lobi católico de justicia social también fundado por religiosas que dio apoyo a la reforma sanitaria de Barack Obama pese a las objeciones de los obispos. La jerarquía de la Iglesia católica en EEUU se ha opuesto a que los seguros cubran anticonceptivos, una oposición que llevó a Obama a eximir de esa obligación a instituciones católicas como universidades y hospitales. Las monjas y hermanas superioras apoyaron la reforma sanitaria.

«ASOMBRADAS» / Aunque el estudio del grupo lo inició el Vaticano en el 2008, la decisión anunciada el miércoles por la Congregación de la Doctrina de la Fe ha pillado por sorpresa. Y Annmarie Sanders, hermana de la Inmaculada Concepción de María y directora de comunicaciones de LCRW, emitió un comunicado mostrando el «asombro» por la decisión vaticana. Sanders pospuso más declaraciones hasta el mes que viene, cuando el liderazgo del LCRW revisará el mandato de la Congregación para la Doctrina de la Fe, que ahora dirige un estadounidense, el cardenal William Levada, y de la que se encargó el cardenal Joseph Ratzinger antes de convertirse en el Papa Benedicto XVI.