Las protestas 2.0

Los activistas tratan de tomar el relevo de los antiglobalización

Los portavoces de los indignados, ayer.

Los portavoces de los indignados, ayer.

M. V.
MADRID

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El primero en preguntar fue el corresponsal del canal de noticias estadounidense CNN. Luego otro británico. Y así hasta seis medios internacionales. La singular rueda de prensa celebrada ayer en Madrid por el movimiento 15-M fue un termómetro exacto de la expectación despertada en todo el mundo por la convocatoria de mañana. Del 15-O. Expectación, sobre todo, por saber si las 660 concentraciones anunciadas en 80 países van a dar paso a un movimiento de protesta coordinado y de carácter global. El primero desde los antiglobalización. «Es lo importante que queremos preguntar», puntualizó en su más que correcto español el hombre del canal de noticias.

La respuesta hay que buscarla en España porque aquí nació el 15-O, en una asamblea de la Puerta del Sol de Madrid celebrada el 30 de mayo. España exporta ahora indignación. La respuesta no les decepcionó. Las convocatorias se han coordinado a través de internet «de modo horizontal, sin jerarquías, con grupos de trabajo» conjuntos de la organizaciones y ciudades de todo el mundo que se han sumado. Incluso se han celebrado reuniones virtuales a través de un servicio Skype pero sin imagen, solo con voz. Para el pos15-O se seguirá trabajando así. «Los grupos de trabajo decidirán qué se hace después».

Esta claro que si el éxito acompaña la convocatoria, la sucesión a los antiglobalización se habrá producido y lo hará con dos características que lo diferencian de su antecesor, además de su denominación de origen español: la no violencia y el enfoque. Los indignados no están contra la globalización, sino que quieren extenderla a los ciudadanos. «De la misma forma que se unen los depredadores del sistema financiero, así tenemos que unirnos las personas», recoge el manifiesto del 15-O.

ANÓNIMOS / Los organizadores están convencidos de que el éxito les acompañará. «Es muy fácil movilizar a la gente cuando el 99% de la población oprime al otro 1%. La ciudadanía tiene que salir el 15 de octubre para demostrar que tiene fuerza», dijo ayer Manolo, portavoz de turno de la comisión de economía de la Asamblea Sol. El apellido no lo facilitó, como tampoco quisieron que se mencionara el suyo el resto de casi una decena de portavoces. «Llámadme Marta Indignadísma», respondió, por ejemplo, la miembro de comunicación de Democracia Real Ya.

Una de la señas de identidad del movimiento es la falta de dirigentes, de caras reconocibles. Los portavoces se turnan y son casi anónimos. Anonymus. Por eso las ruedas de prensa son un hecho infrecuente y cuando se producen son tan singulares. Los intervinientes eran reprentantes ocasionales de DRY, Juventud Sin Futuro, Asamblea Sol, Atacc y otras plataformas se turnan indistintamente en las respuestas.

Pese a ello, la discrepancia es mínima. Ni siquiera en los temas más espinosos como el electoral hay divergencias. «Es ridículo vincular el 15-O con las elecciones. La convocatoria es anterior y mundial y no sé que interés pueden tener, por ejemplo, en Estados Unidos por el 20-N», afirmó uno de los portavoces.