Tijeretazos presupuestarios

Un agujero en la caja

Cuando de la caja sale mucho más dinero del que entra, una empresa o Administración se queda sin efectivo para afrontar los pagos habituales. Es lo que ha pasado en las arcas de la Generalitat, que, ante la imposibilidad de recurrir al mercado para obtener financiación (alrededor de 200 millones), ha optado por demorar pagos y así poder abonar las nóminas.

Centenares de personas del sector sanitario se manifestaron ayer frente a la Conselleria de Salut y después marcharon hasta la plaza de Sant Jaume.

Centenares de personas del sector sanitario se manifestaron ayer frente a la Conselleria de Salut y después marcharon hasta la plaza de Sant Jaume.

AGUSTÍ SALA

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1 ¿Por qué se han demorado pagos?

Facturas de julio y agosto pendientes, intereses (crecen a un ritmo superior al 50%)... ¿Imprevisión? Las salidas de la caja de la Generalitat se han acelerado y ha obligado al Govern a «fijar prioridades absolutas» de pago, según fuentes de Economia, que aseguran que «hace semanas que se estudian». Anteponer unas facturas a otras, una tarea que ha realizado cada conselleria, evita recurrir al endeudamiento, prácticamente imposible para las administraciones. «Es un tema puntual. Una vez tomadas las medidas se habrá regularizado todo antes de final de año y en octubre ya se pagará normalmente».

2 ¿De cuánto es el desfase?

El Govern no ha desvelado en ningún momento el desfase de tesorería que se ha producido. No obstante, se cifra en menos del 1% del gasto total, lo que supondría unos 200 millones de euros. Fuentes del anterior Govern aseguran que las entradas y salidas de caja son «muy regulares». Pero lo cierto es que el impuesto de sucesiones, tras ser prácticamente suprimido por el actual Govern, recaudó casi el 40% menos hasta agosto; y el de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos cayó en torno al 7%. También se han reducido transferencias que el Estado considera «no prioritarias», afirman fuentes oficiales.

3 ¿Hay facturas pendientes?

Desde enero, el saldo mensual de compromisos pendientes de la Generalitat ha caído en 2.000 millones. Comenzó en enero por encima de 5.300 millones y cayó en agosto hasta 3.375 millones. En septiembre volvió a crecer. El objetivo es cerrar el año con un saldo pendiente de 4.400 millones. En la auditoría que hizo de las cuentas del 2010, Deloitte destaca que el desfase de tesorería con el que comenzó el 2011 dificultaba afrontar pagos a su vencimiento. Ahora se ha optado por superar el bache con retrasos. «Así, esta medida puntual no habrá que volver a repetirla en lo queda de año», afirman en el Govern.

4 ¿Están a salvo las nóminas?

Aunque el Govern quita hierro a la medida de retrasar pagos por ser «puntual», el importe «es suficientemente importante» como para que se pueda atender al pago de nóminas, que asciende este año a 5.149 millones, a razón de 429 millones mensuales -el doble si se incluye todo el sector público-, según fuentes oficiales. La de personal es la segunda partida con más peso en el presupuesto de gastos de la Generalitat, solo superada por las transferencias corrientes. El Govern precisamente ha reducido este año en 1.225 millones las aportaciones al sector público, lo que ha obligado a este a ajustarse también el cinturón.

5 ¿Ha habido otros retrasos?

No es la primera vez que el Govern retrasa pagos por falta de liquidez. El tripartito comunicó en junio del año pasado a los centros concertados del Servei Català de la Salut (SCS) que les pagaría la factura de unos 400 millones mensuales en 90 en vez de los 75 días con los que lo hacía con anterioridad. Este sector se ha visto afectado otra vez porque Salut les pagará solo el 65% de la factura y el resto antes de final de año. En todo caso «se estudia caso por caso» y no se descarta que algunas conselleries cambien de prioridades ante la contestación social, como es el caso de Benestar Social y los geriátricos concertados.