Hallada ahorcada la expareja de una chica desaparecida en Boadilla

María Piedad García Revuelta asistió el pasado sábado a la cena de Navidad organizada por sus compañeros de trabajo del supermercado Mercadona de Boadilla del Monte (localidad al oeste de Madrid). Allí coincidió con su expareja, Javier Sánchez-Toledo, quien se ofreció a llevarla a casa. Fue la última vez que se vio a la mujer de 26 años con vida.

Su excompañero sentimental fue encontrado el miércoles ahorcado de una torre de la luz de una zona boscosa de El Escorial (otra localidad madrileña). Asimismo, su coche está siendo analizado para determinar a quién pertenecen los restos biológicos encontrados en su interior. Fuentes de la investigación precisaron a EFE que en el vehículo había sangre tanto de María García como de su expareja, por lo que una de las hipótesis que maneja la Guardia Civil es que este se suicidó después de acabar con la vida de María.

Un centenar de agentes buscaron ayer a la víctima en un descampado al sur de la capital madrileña. Los agentes rastrearon los pozos y los huecos en el subsuelo pero no encontraron rastro de la mujer, pese a que los mensajes de móvil que María envió a su madre el domingo de madrugada les habían conducido hasta dicho lugar.

En Extremadura ayer se produjo también un nuevo caso de violencia machista: un hombre de nacionalidad española y de 59 años mató a su expareja, una marroquí de 44 años, que residía en Badajoz y después se suicidó. Esta muerte eleva a 69 el número de fallecidas en el 2010, una trágica lista a la que puede sumarse la joven de Boadilla si finalmente se halla su cadáver

El agresor de Badajoz tenía una orden de alejamiento desde el pasado septiembre que fue reducida de riesgo medio a riesgo no apreciado, según reconoció la delegación del Gobierno en Extremadura. La víctima había denunciado varias veces a su expareja por amenazas aunque no por agresión y ambos tenían un hijo en común de 9 años.

LA DENUNCIA / Precisamente ayer varios grupos pidieron en el Congreso a la ministra de Sanidad, Leire Pajín, que se proteja mejor a las maltratadas que se atreven a denunciar. La ministra reconoció que hay que mejorar la respuesta que se ofrece a estas víctimas pero recordó que el principal problema es que solo el 27% de las fallecidas habían recurrido a la justicia. Por eso anunció que las próximas campañas de sensibilización se van a centrar en la necesidad de que las víctimas confíen en las autoridades.