La visita del Pontífice

Dos cazas F-18 escoltarán el avión del Papa en cielo español

Señalización extraordinaria en el entorno de la Sagrada Família motivada por la visita del Papa.

Señalización extraordinaria en el entorno de la Sagrada Família motivada por la visita del Papa.

MAYKA NAVARRO
MADRID

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El Papa no volará solo a Santiago de Compostela y Barcelona. Dos cazas F-18 del Ala 15 de la base de Zaragoza del Ejército del Aire escoltarán su avión en todos sus desplazamientos por el espacio aéreo español. Esta será la única aportación de Defensa al dispositivo de seguridad del Pontífice, tras descartarse la instalación de una batería antiaérea en el aeropuerto de El Prat como la que se dispuso en el 2002 durante la cumbre europea de Barcelona.

Eran otros tiempos aquellos, de mayor tensión internacional, pero la visita del Papa el próximo fin de semana a España lleva parejo un complejo dispositivo de seguridad en el que solo los Mossos d'Esquadra en las 36 horas que Benedicto XVI permanecerá en Barcelona dedicarán 3.500 agentes, cifra que incluye a todos sus aspirantes a policías, que tendrán su primera misión participando en el cordón del recorrido del papamóvil. La Conselleria d'Interior ha sacado mossos de los servicios penitencarios y de seguridad ciudadana, además de las unidades especializadas en orden público, como Arro y Brimo. Todos los policías autonómicos trabajarán el domingo cobrando horas extras.

La coordinación del dispositivo de seguridad se hará desde la sala conjunta de la calle de Lleida, donde estará instalado el CECOR y desde cuyas pantallas se seguirá el desarrollo de todos los actos.

GEOS EN LAS ALTURAS / Las funciones de cada cuerpo están bien definidas. No solo por esta visita. Por ejemplo, el control de las alturas, que es el término policial que define a los francotiradores de élite que protegen al visitante de una amenaza, las cubrirán los GEO (Grupos Especiales Operativos) del Cuerpo Nacional de la Policía (CNP), tanto en el templo de la Sagrada Família, como en el hospital del Nen Déu. Se ha decidido así porque existe un convenio entre el CNP y los Mossos por el que si las alturas se pueden proteger desde el edificio en el que está el visitante, lo hacen los GEO.

En cualquier caso, la ceremonia en la Sagrada Família y los tres kilómetros y medio de recorrido del papamóvil por las calles de Barcelona serán los momentos de más alto riesgo de este complejo dispositivo.

RECORRIDO MUY LARGO / ¿Por qué? Fuentes conocedoras del dispositivo aseguraron que «nunca» hasta ahora el Papa en sus visitas ha hecho un trayecto tan largo en papámovil. La seguridad ciudadana será responsabilidad de los Mossos. El recorrido, vallado, tendrá un cordón policial en el que se alternará un agente autonómico y un aspirante de la academia. Y rodeando al papamóvil, en la cápsula, estará la seguridad personal del Pontífice y, detrás, un equipo de los GEO. Nada más. Cualquier maniobra de reacción ante un incidente durante el recorrido quedará en manos de la Brigada Móvil o los GEI (Grups Especials d'Intervenció) de los Mossos. Pero estos grupos estarán desplegados fuera del recorrido con la complicación que conlleva que puedan moverse ante cualquier incidente, teniendo en cuenta las aglomeraciones que se espera que hayan durante el trayecto.

Los edificios de vecinos estarán controlados en las alturas por mossos. El Papa pasará junto a 31 manzanas vigiladas desde las azoteas, y en los puntos estratégicos se colocarán francotiradores de los GEI.

Pero sin duda el momento más arriesgado de la estancia de Benedicto XVI en España serán los minutos en los que el Papa bendiga a los asistentes al rezo del ángelus que hará en la fachada del Neixament de la Sagrada Família. Durante la ceremonia, el Pontífice estará protegido por una casi indetectable pantalla antibalas.

Porque a diferencia de anteriores visitas, esta será la primera vez que el Papa se expondrá al aire libre con edificios a menos de un kilómetro de distancia. En la Sagrada Família, los bloques se encuentran a 200, 300 y 400 metros. Una distancia perfecta para un francotirador.