El Papa defiende en Sao Paulo la vida "desde la concepción hasta su declive natural"

EFE / SAO PAULO

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El papa Benedicto XVI ha llegado hoy a Brasil en un viaje pastoral de cinco días que tiene por principal objetivo presidir la quinta Conferencia General del Episcopado Latinoamericano (CELAM), que se celebrará en el Santuario de Aparecida en la ciudad de Sao Paulo.

Nada más descender del avión en el aeropuerto de Guarulhos y tras saludar a las autoridades, encabezadas por el presidente Luiz InazioLulada Silva, el Papa ha pronunciado su primer discurso.

"Me siento muy feliz de estar aquí. Se que el alma de este pueblo y de toda América Latina custodia valores radicalmente cristianos que jamás serán cancelados. Tengo la certeza que en Aparecida esta identidad será reforzada, promoviendo el respeto de la vida desde el momento de la concepción hasta su declive natural", ha declarado Benedicto XVI.

Campaña contra el aborto

En esas palabras han visto los observadores vaticanos una advertencia a países como México, donde se ha legalizado parcialmente el aborto, y al propio Brasil, donde hay una propuesta para debatir la celebración de un referendo sobre el tema.

Ya durante el vuelo, el Papa ha criticado a los políticos que defienden la interrupción voluntaria del embarazo. Benedicto XVI ha señalado que "no es nada nuevo" la excomunión de los diputados que respaldaron la legalización del aborto en las primeras 12 semanas del embarazo en la Ciudad de México, ya que, afirmó, "así está previsto en la doctrina de la Iglesia".

Benedicto XVI ha dicho también que la Iglesia católica tiene como objetivo prioritario la promoción de la persona, sobre todo con los pobres y los abandonados. El Pontífice ha subrayado que la Iglesia católica solo pretende indicar los valores morales de cada momento y formar a los ciudadanos para que puedan decidir libremente.

En la misma línea que viene marcando desde el comienzo de su pontificado, el Papa ha manifestado que la Iglesia no desistirá en su compromiso de apoyo a la consolidación de la familia como célula básica de la sociedad.

Apoyo a la juventud y elogio de Brasil

También ha expresado su apoyo a la juventud, de la que ha dicho que su formación constituye un factor decisivo para el futuro de una nación. Bendicto XVI ha agregado que siempre defenderá y promoverá los valores en todos los extractos sociales, sobre todo en las poblaciones indígenas.

Refiriéndose a los brasileños, ha dicho que Brasil ocupa un lugar muy importante en su corazón, "no solo porque nació cristiana y posee hoy el mayor número de católicos [155 millones según el Vaticano], sino principalmente porque es una nación rica de potencialidad con una fuerte presencia eclesial [8.000 sacerdotes y 257 obispos] que es motivo de alegría y esperanza para toda la Iglesia".

El Pontífice ha manifestado también su deseo de que de la reunión de la CELAM salgan las propuestas "que podrán dar un renovado vigor e impulso misionero a este continente". El Papa ha subrayado que en esta región los católicos son mayoría y ello significa que deben contribuir de una manera particular al servicio del bien común de la nación.

"El problema de las sectas"

El Papa ha hablado de solidaridad entre las fuerzas vivas de la sociedad y ha reiterado que la Iglesia está al servicio de la paz y de la justicia. El Papa considera que "el granero de católicos del mundo necesita una nueva evangelización para afrontar entre otras el problema de las sectas y el avance de sociedades cada vez más secularizadas".

El número de católicos está descendiendo vertiginosamente en América Latina en favor de las Iglesias pentecostales y evangélicas, que solo en Brasil cuentan con 24 millones de adeptos. También están muy introducidas en México, Guatemala y Chile.

Diálogo con Lula sobre la pobreza

Benedicto XVI ha dicho ante los periodistas que el "éxito" de las sectas demuestra que existe una fuerte sed de Dios y que la Iglesia católica tiene que buscar esos nuevos caminos junto con los fieles para encontrar unas condiciones de vida justas. Según los observadores, el éxito de las sectas en Latinoamérica se debe a las crisis del catolicismo, a la decadencia moral de la sociedad y la pobreza en la que vive gran parte de la población.

De pobreza hablará el Pontífice con el presidente Lula con quien se reunirá mañana, jueves, en Sao Paulo. Para Benedicto XVI la lucha contra la pobreza es prioritaria para la Iglesia latinoamericana ya que afecta a la educación, la salud, la vivienda y el desarrollo integral de la persona. Mañana, el Papa se reunirá también con miles de jóvenes en un estadio de Sao Paulo.